Independiente ha comenzado el Torneo Apertura de la LPF con un rendimiento excepcional, al lograr tres victorias de manera consecutiva, lo que lo posiciona como único líder del Grupo B.

En su última aparición en el Estadio Libertadores de América, el equipo triunfó 2-0 sobre Gimnasia, con goles de Gabriel Ávalos, quien convirtió un penal, y Álvaro Angulo.

Por el contrario, el equipo visitante se encuentra en una situación complicada, habiendo perdido los tres partidos disputados y acumulando un total de seis derrotas en línea, tanto del torneo anterior como del actual.

El encuentro estuvo marcado por dos momentos clave que requirieron la tecnología del VAR en el primer tiempo. El primero se produjo para confirmar la decisión del árbitro Echavarría en relación a un penalti sancionado a favor de Independiente, situación que generó controversia en el estadio, ya que muchos consideraron que el defensor de Gimnasia, Gastón Suso, no tenía intención de tocar el balón con el brazo.

Sin embargo, la decisión fue ratificada desde Ezeiza, permitiendo a Ávalos abrir el marcador desde los once pasos.

La segunda intervención del VAR ocurrió a los 16 minutos del primer tiempo, cuando se anuló un gol de Kevin Lomónaco por los incidencias de una posición de fuera de juego, que fue correcta tras revisar la jugada.

Estas decisiones reflejaron la importancia de la tecnología en el fútbol moderno y la superioridad inicial del conjunto local.

Gimnasia, que atraviesa un periodo complicado, sigue sin encontrar su camino, con un nuevo entrenador interino y una falta de gol alarmante. Pese a estos problemas, el equipo intentó equilibrar el partido durante el segundo tiempo, logrando algunas aproximaciones pero sin materializar oportunidades claras

A medida que avanzaba la segunda mitad, Independiente continuó buscando ampliar su ventaja, y finalmente encontró el segundo gol a los 38 minutos.

Álvaro Angulo aprovechó un centro desde la derecha y un error defensivo del rival para aumentar la distancia. Sin embargo, la expulsión del joven Santiago Villarreal por una falta a Marcone dejó a Independiente con un jugador menos en los minutos finales.

A pesar de la tensión en el final del encuentro, el arquero Gonzalo Rey se mostró seguro bajo los tres palos, evitando que Gimnasia recortara distancias en el marcador.

Con este triunfo, Independiente repite un arranque que no lograba desde el Apertura de 2007, donde bajo la dirección de Pedro Troglio, ganó sus primeros cuatro partidos, aunque terminó en un modesto noveno puesto.

El equipo dirigido por Julio Vaccari se ilusiona con un futuro más brillante, y se preparan para enfrentar a River Plate en el Monumental el próximo 8 de febrero, un desafío que será fundamental para mantener su posición de privilegio.

Después de este enfrentamiento, también recibirán al campeón vigente, Vélez, en Avellaneda. De esta manera, el inicio del torneo pinta muy prometedor para el mundo rojo.