El delantero argentino Maximiliano Salas confirma su salida de Racing para unirse a River Plate, en medio de desacuerdos con la directiva y una cláusula de rescisión de aproximadamente 7 millones de euros.
Maximiliano Salas, uno de los jugadores más destacados del Racing Club de Avellaneda, oficializó su traspaso al Club Atlético River Plate en un movimiento que ha generado controversia en el fútbol sudamericano.
La transferencia se concretó tras un proceso en el que el jugador decidió activar su cláusula de rescisión, que asciende a la cifra de 8 millones de euros, lo que equivale aproximadamente a 7 millones de euros, considerando el cambio de divisas y la economía europea.
El pase ocurrió en medio de una fuerte polémica, ya que Salas había expresado públicamente su intención de renovar con Racing tras haber logrado un aumento salarial y haber manifestado su compromiso con la institución.
Sin embargo, el jugador decidió cambiar de rumbo, lo que generó malestar entre algunos dirigentes y seguidores del equipo de Avellaneda.
La decisión fue confirmada por el propio jugador a través de una publicación en Instagram, donde expresó su sentir y agradeció a quienes lo apoyaron en su paso por Racing.
En su mensaje, Salas aclaró que nunca le dio su palabra ni a la dirigencia ni a nadie en el club, y que la versión que circuló sobre su compromiso con la renovación era falsa.
"Cuando River me llamó, y también Racing, todavía no me habían mejorado el contrato. Recién en ese momento se dieron cuenta de que existía interés por mí y me ofrecieron un nuevo acuerdo cuando ya había interés de River", afirmó.
Durante su tiempo en Racing, Salas dejó huella en la afición y en la historia reciente del club. Llegó en una etapa de cambios y se consolidó como uno de los delanteros más peligrosos de su equipo, logrando títulos importantes como la Copa Sudamericana y la Recopa Sudamericana, éxitos que quedaron grabados en la memoria de los hinchas.
Además, su historia personal marca una narrativa de sacrificio y perseverancia, ya que desde muy joven tuvo que afrontar dificultades y trabajar duro para alcanzar el éxito en el fútbol.
El jugador mencionó que desde que llegó a Racing lo hizo en libertad, con el pase en su poder, y que el contrato que mantuvo hasta su salida fue el mismo que firmó en el momento de su llegada, sin recibir mejoras o beneficios adicionales, lo que considera una desilusión.
Además, expresó su malestar por cómo la directiva manejó su situación, ya que, pese a las reiteradas solicitudes de su representante para mejorar su salario, la respuesta siempre fue negativa con la excusa de “demostrar” su valía.
Salas también criticó duramente a la dirigencia, asegurando que le hicieron sufrir y que además, algunas declaraciones en los medios de comunicación han sido malintencionadas, intentando vincularlo con una supuesta falta de compromiso o palabra.
El futbolista afirmó que su decisión de partir fue por dignidad, después de meses de trato indiferente y de un desgaste emocional que decidió terminar de raíz.
Este movimiento llega en un contexto en el que los clubes argentinos y sudamericanos buscan maximizar sus ingresos a través de transferencias internacionales, un fenómeno que ha cobrado fuerza en los últimos años.
La cláusula de salida de Salas, que en su momento fue negociada en torno a los 8 millones de euros, refleja el valor que el jugador tiene en el mercado.
En el fútbol europeo, este tipo de transacciones son frecuentes y alcanzan cifras mucho mayores, pero en Sudamérica, movimientos similares se están convirtiendo en una tendencia para dar mayor valor a las figuras emergentes.
Por su parte, River Plate, uno de los clubes más grandes de Argentina y con una rica historia en competiciones internacionales, ha visto en la incorporación de Salas una oportunidad para fortalecer su plantilla.
La llegada del delantero se suma a un mercado en el que los clubes buscan talento con potencial y capacidad de impactar en el corto plazo. La inversión en Salas demuestra también la confianza del club en su futuro rendimiento y en la posibilidad de repetir los éxitos que lograron en años anteriores, incluyendo cinco títulos de la Copa Libertadores.
En definitiva, la transferencia de Maximiliano Salas refleja los vaivenes y desafíos del fútbol profesional sudamericano, donde las cuestiones económicas, los intereses de los jugadores y las decisiones institucionales se entrelazan en una historia que continúa desarrollándose en medio de la pasión y la tensión que caracteriza a este deporte en la región.