El equipo de Pellegrino ganó 1-0 en una noche marcada por una jugada de calidad y una decisión polémica del VAR en La Fortaleza ante Independiente Rivadavia, avanzando a los cuartos de final de la Sudamericana.
En una fría noche en La Fortaleza, el equipo de Lanús logró una victoria ajustada de 1-0 frente a Independiente Rivadavia, un resultado que los acerca a los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
La jugada que definió el encuentro sucedió a los 55 minutos del segundo tiempo, cuando una serie de cuatro toques consecutivos iniciados por Morgantini culminaron en un gol de Walter Bou.
El exjugador de Boca Juniors controló el balón en el área y descargó una potente definición que el arquero Centurión no pudo detener.
Este tanto fue producto de una jugada de mucha precisión y rapidez, que evidenció la sencillez del fútbol cuando se ejecuta con inteligencia y coordinación.
La secuencia comenzó con Morgantini filtrando un pase preciso entre los defensores rivales, Bou controló de primera y, sin dejar que la pelota se le enredara, envió un pase a Moreno, quien, a su vez, descargó para Salvio por el costado derecho.
Este último centró rasante hacia el punto penal, donde Bou, con una definición certera, empujó el balón al fondo del arco.
El encuentro fue mayormente controlado por Lanús, que dominó el ritmo del juego en La Fortaleza. Sin embargo, en los últimos minutos, la tensión creció tras una decisión polémica del VAR. El defensor Castillo recibió una tarjeta roja infantil por una falta en el área a minutos del cierre, lo que generó cierto entusiasmo en las filas de la visita, a pesar de que no lograron igualar el marcador.
Este resultado mantiene a Lanús en una buena posición de cara a los próximos duelos, siendo considerado uno de los equipos con más potencial en la actual edición de la Sudamericana.
La eliminación de Castillo por la tarjeta roja, que en realidad fue una decisión discutible tras una revisión de VAR, fue un momento clave que afectó el orden de Independiente Rivadavia y fortaleció la confianza del conjunto granate.
Históricamente, Lanús ha sido uno de los clubes argentinos más destacados en competencias internacionales. En 2013, lograron alcanzar la final de la Copa Sudamericana, un logro que elevó su perfil en el continente. Desde entonces, su participación en torneos internacionales ha sido constante, consolidándose como un equipo con una defensa sólida y ataques rápidos que suelen sorprender a sus rivales.
Ahora, con esta victoria, Lanús se prepara para su próximo enfrentamiento, que podría ser decisivo para clasificar a las instancias finales del torneo.
La afición del club mantiene la esperanza de repetir actuaciones memorables y lograr avanzar más allá de los cuartos de final, algo que no logran desde su buena actuación en 2013.
Por otra parte, el fútbol sudamericano continúa demostrando ser un escenario donde la sencillez y la precisión pueden marcar la diferencia en los partidos de eliminatoria directa.
La historia de los clubes y los momentos clave en cada juego revelan que, en este deporte, con un buen principio y un momento de inspiración, los resultados se vuelven favorables.
La noche en Lanús quedó marcada por ese gol y la controvertida decisión del VAR, que quedarán en la memoria de los aficionados y en los registros del torneo.