El conjunto catalán sufrió una derrota severa en su primer partido de la temporada, con errores del arquero argentino Paulo Gazzaniga que le costaron caro. El Girona perdió 0-3 en su estreno en La Liga frente al Rayo Vallecano, en una jornada marcada por metidas de pata del guardameta, que incluyeron un gol en propia puerta y una expulsión. El inicio de la temporada ha sido un golpe duro para el equipo dirigido por Míchel Sánchez, que ahora busca ganar confianza en la próxima fecha ante el Villarreal.

El debut del Girona en la temporada 2025/2026 de La Liga española dejó una de las imágenes más llamativas de la primera fecha: la actuación del arquero argentino Paulo Gazzaniga, que jugó un papel central en la derrota de su equipo contra el Rayo Vallecano.

La actuación de Gazzaniga fue involuntariamente polémica, ya que cometió dos errores graves que afectaron directamente el marcador y derivaron en su expulsión.

El primer incidente ocurrió a los 18 minutos de juego. Un defensor del Girona intentó salir jugando desde atrás y, bajo presión, le entregó la pelota a Gazzaniga dentro del área. El arquero no logró controlar el balón con precisión, y este se le escapó de las manos. Aprovechando la situación, un delantero del Rayo Vallecano consiguió rematar al arco vacío y abrió el marcador, marcando además el primer gol de la temporada en La Liga 25/26.

Este error fue especialmente doloroso para el equipo catalán, que en ese momento intentaba mantener el control del partido.

Pero la pesadilla no terminó allí. A los 43 minutos, en un momento en el que el Girona buscaba reorganizarse, Gazzaniga intentó salir jugando desde su área en compañía de su compañero De Frutos.

La presión del delantero rival, Isi Palazón, fue intensa, y en un intento por eludirlo, Gazzaniga perdió la pelota. En su afán por corregir la situación, cometió una falta que el árbitro sancionó con penalti y tarjeta roja, dejando a su equipo con un jugador menos.

La ejecución la convirtió Isi Palazón, amplificando la diferencia con un marcador de 3-0 antes de irse al descanso.

El Girona, con un hombre menos, tuvo que luchar en la segunda mitad para reaccionar. A los 57 minutos, Joel Roca logró anotar un gol para reducir la diferencia, pero la tarea fue demasiado difícil tras el inicio adverso y la expulsión.

A pesar de la frustración, el técnico Míchel Sánchez dio respaldo a su arquero, afirmando que "han sido dos accidentes y en Primera División esos accidentes se pagan caro".

Asimismo, destacó la actitud del equipo en la segunda parte, que supo sufrir y mejorar en el campo.

Este inicio de temporada resulta un golpe duro para el Girona, que rápidamente debe poner la mira en la próxima jornada, donde enfrentará al Villarreal en busca de sumar puntos y volver a la senda del éxito.

La actuación de Gazzaniga en su debut ha generado mucha discusión en redes sociales, siendo visto tanto como un error grave como una mala suerte que puede corregirse con trabajo y apoyo.

El guardameta, que llegó al club en 2024 a cambio de una inversión de aproximadamente 45 millones de euros, tiene la experiencia necesaria para sobreponerse y demostrar su valía en esta nueva temporada.

Históricamente, el Girona ha atravesado temporadas con altos y bajos, y estos errores en el arranque pueden marcar la diferencia en su desarrollo. La Premier League y La Liga encuentran en los errores de sus jugadores un elemento que muchas veces define la suerte del equipo en momentos cruciales.

Ahora, el reto del Girona será levantarse tras este difícil comienzo, con la esperanza de que su portero vuelva a brillar y el equipo logre revertir la situación en las próximas jornadas.