El entrenador italiano de renombre internacional, Carlo Ancelotti, aterriza en Río de Janeiro para comenzar su etapa como director técnico de la selección brasileña, marcando un hito histórico en el fútbol del país.

Río de Janeiro, 26 de mayo de 2025 – El reconocido entrenador italiano Carlo Ancelotti ha llegado a Brasil para asumir oficialmente su cargo como director técnico de la selección nacional, en un acontecimiento que marca un antes y un después en la historia del fútbol brasileño.

A sus 65 años, Ancelotti se convierte en el primer técnico extranjero en dirigir a la selección en un período de cien años, rompiendo con una tradición que predominaba en el fútbol sudamericano.

Ancelotti arribó a Río de Janeiro en la noche del domingo, acompañado de algunos miembros de su familia y su equipo de trabajo, en un vuelo privado que despegó desde Europa.

La llegada no estuvo rodeada de una gran ceremonia, solo un aficionado con una camiseta de Brasil pudo verlo en el aeropuerto internacional, donde salió con discreción.

No obstante, su presencia genera grandes expectativas en la afición y en los dirigentes del fútbol brasileño.

El técnico italiano será presentado oficialmente el lunes en una conferencia de prensa en el hotel donde se alojará, y allí compartirá sus primeras impresiones sobre el proyecto y sus metas a corto y largo plazo.

Ancelotti llega en un momento de relativa incertidumbre para la selección, tras los fracasos de los entrenadores interinos Ramón Menezes y Fernando Diniz, quienes no lograron resultados satisfactorios en los últimos partidos.

Además, en marzo último, Dorival Júnior fue despedido tras una derrota contundente contra Argentina por 4-1.

Brasil, que ha ganado la Copa del Mundo en cinco ocasiones, está en una fase de transición y busca fortalecer su plantel para las próximas competencias internacionales, especialmente el próximo Mundial.

La contratación de un técnico de la talla de Ancelotti, que ha dirigido clubes como el Real Madrid y el Bayern Múnich, refleja la intención de la federación de dar un giro a su estrategia y buscar resultados más sólidos.

El contrato de Ancelotti con Brasil se extiende hasta la próxima Copa del Mundo, prevista para 2026 en Estados Unidos, Canadá y México. Antes de su llegada, el nuevo presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Samir Xaud, aseguró que el entrenador tendrá total autonomía para definir la plantilla y las estrategias, además de estar protegido de cualquier injerencia externa o conflictos internos.

El proceso electoral en la CBF fue turbulento, con la salida de Ednaldo Rodrigues, quien había sido reelegido en 2022, tras acusaciones de irregularidades en el proceso electoral.

Rodrigues, en su momento, fue quien contrató a Ancelotti para dirigir al Real Madrid, pero ahora el nuevo liderazgo busca un cambio de rumbo.

En las calles de Río, algunos hinchas expresaron su optimismo con la llegada del técnico europeo. Flávio Mileny, un aficionado de Belém que visitó Río, comentó: “No podemos confiar mucho en Neymar ni en la CBF, pero Ancelotti nos trae esperanza.

Aunque no gane el Mundial el próximo año, confiamos en que podrá lograrlo en el futuro. Él ha ganado todo, y eso nos llena de confianza”.

Por su parte, Eliane Salieri, quien lucía una chaqueta de la selección, expresó: “Creo que es hora de que un extranjero dirija a nuestro equipo.

Personalmente, quería a Jorge Jesús, pero Ancelotti también es un gran técnico. Tiene una carrera impresionante y todos lo respetan”.

Xaud, en tanto, afirmó a los medios que Ancelotti tendrá plena libertad para trabajar, en un contexto de incertidumbre y conflictos internos en la federación.

La elección de Xaud, oriundo del estado de Roraima y sin experiencia previa en cargos similares, fue respaldada principalmente por las federaciones regionales, aunque muchas de las principales clubes del país no enviaron representantes al proceso electoral.

Brasil se prepara para afrontar un futuro con nuevos desafíos, y la llegada de Ancelotti representa una esperanza de cambio y renovación. La expectativa ahora está puesta en conocer las decisiones que tomará en su primer contacto con la selección, y en si logrará devolver a Brasil a la senda del éxito en el fútbol internacional.