El club de Avellaneda enfrentará una penalización de tres partidos sin público y restricciones en el uso de elementos en su estadio, tras el uso de pirotecnia durante un encuentro de la Copa Libertadores ante Flamengo. La sanción lo impactará tanto en aspectos deportivos como económicos.

La Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) de la provincia de Buenos Aires ha impuesto una fuerte sanción al club de Racing Club de Avellaneda, debido al uso de elementos pirotécnicos en la previa a uno de sus partidos en la Copa Libertadores.

La medida, emitida en la resolución 205/2025, establece que el equipo deberá jugar sus próximos tres partidos en condición de local sin presencia de público en las gradas, y con restricciones en el uso de instrumentos y objetos en el estadio Presidente Perón.

Este castigo llega en un momento en que el fútbol sudamericano vive una serie de incidentes relacionados con la violencia y el uso de pirotecnia. La medida de la Aprevide está basada en la falta de controles adecuados por parte de la organización del club en la manipulación de los materiales peligrosos que fueron usados minutos antes del inicio del encuentro contra Flamengo, correspondiente a las semifinales de la Copa Libertadores.

El comportamiento de los hinchas, que encendieron bengalas y otros artefactos explosivos sin autorización, provocó daño y heridas. Al menos dos personas sufrieron quemaduras y fueron atendidas en el Hospital Fiorito, al sur de Buenos Aires. La propia Aprevide resaltó que la utilización de estos objetos puso en riesgo la integridad física de todos los presentes en el estadio, incluyendo socios, simpatizantes y personal de seguridad.

Lo que aún agrava más la situación es que, según el organismo, Racing ha tenido incidentes similares en el pasado reciente. Una sanción previa se había aplicado en octubre de 2024, cuando el club recibió una prohibición de asistir a su estadio durante 30 días por hechos similares ocurridos ante Corinthians en las semifinales de la Copa Sudamericana.

Además, en los días previos al enfrentamiento con Flamengo, se filtró un audio en el que Gustavo Costas, entrenador del equipo, incentivaba a los hinchas a alentar con intensidad, sin considerar las regulaciones.

En aquel audio, el técnico desafió las normas con frases como “Tiremos la cancha abajo, los vamos a pasar por arriba. No importa que nos cobren una multa, me chupa un huevo”. Estas declaraciones reflejan el ambiente de pasión pero también la falta de control que llevó a la sanción de hoy.

Por otra parte, en el aspecto económico, Racing puede enfrentarse a sanciones adicionales, ya que la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) también está evaluando las conductas del club y podría imponerle multas que superen los 20.000 euros (unos 21.500 dólares). Estas sanciones no solo afectarán la economía del club, sino también su imagen deportiva y su relación con las autoridades del fútbol sudamericano.

La prioridad de la Aprevide y de las autoridades futbolísticas es garantizar un ambiente seguro en los estadios, combatiendo las conductas violentas y evitando que incidentes como estos se repitan en el futuro.

Para ello, reforzarán las medidas de control y vigilancia, así como campañas de concientización dirigidas a hinchas y dirigentes.

Por el momento, Racing deberá cumplir con las sanciones impuestas y afrontar las dificultades de jugar sin público un mínimo de tres partidos oficiales, en los que perderá la posibilidad de recibir a su hinchada en el estadio.

Se estima que estos partidos podrían incluir enfrentamientos contra Defensa y Justicia, Independiente y otros clubes de la Primera División argentina, impactando también en la taquilla y en la visibilidad del equipo en la cancha.

Además, estas medidas muestran la firmeza de las autoridades para erradicar conductas que ponen en riesgo la seguridad y el buen nombre del fútbol argentino.