Un enfrentamiento intenso en el Monumental concluyó con la clasificación de Platense a las semifinales del Torneo Apertura tras vencer a River en la tanda de penales, en un partido marcado por decisiones arbitrales polémicas y un rendimiento irregular de ambos equipos.
El pasado miércoles, el estadio Monumental de Buenos Aires fue testigo de un encuentro electrizante entre River Plate y Platense, en el marco de los cuartos de final del Torneo Apertura.
El resultado fue un dramático 1-1 en los 90 minutos, seguido por una tanda de penales en la que el equipo visitante, Platense, salió victorioso tras resolver con eficacia desde los once metros.
Este partido se convirtió en uno de los enfrentamientos más memorables del torneo, no solo por la calidad mostrada sobre el césped sino también por las controversias arbitrales y el rendimiento de los dos equipos.
River, que en la historia del fútbol argentino ha sido uno de los clubes más exitosos, llegaba con la expectativa de reforzar su racha y avanzar a semifinales.
Sin embargo, el partido demostró que no siempre la historia es suficiente para asegurar el éxito.
Desde el inicio, ambos equipos mostraron intensidad y deseos de imponerse, aunque con estilos distintos. River intentó dominar el balón con mayor posesión —que alcanzó aproximadamente un 74%— pero careció de la claridad necesaria para romper la defensa rival.
La línea de medio campo de los de Marcelo Gallardo se vio imprecisa, con intermitencias de Nacho Fernández y desconexiones que permitieron a Platense acumular presencia y orden defensivo.
Por su parte, Platense, dirigido por la dupla técnica Orsi-Gómez, salió a la cancha con una estrategia sólida, poniendo énfasis en cerrar espacios y aprovechar las jugadas de pelota larga, que suelen ser un recurso efectivo contra equipos que atacan con mucha intensidad.
La gran fortaleza del equipo visitante fue su disciplina defensiva y un arquero de gran nivel, Rodolfo González, que realizó variasatajas clave durante el encuentro.
El momento crucial llegó en la segunda parte, cuando un penal cometido por Salomón de los Santos, tras una falta de Borja en el área, permitió a Gabriel Schor abrir el marcador para Platense.
La euforia en el campo y en las tribunas fue indescriptible. Pero River no se quedó atrás y respondió rápidamente, igualando el marcador gracias a un gol de Borja, que equiparó la serie y forzó a definir en la tanda de penales.
Los penales fueron dramáticos. La tensión se palpaba en el ambiente y las decisiones arbitrales sumaron incertidumbre al proceso. De hecho, en una jugada polémica, un penal reclamado por los jugadores de Platense en el minuto final de la prórroga fue discutido, pero el árbitro no lo sancionó.
La celebración del penal de Mastantuono en la tanda definitiva selló el pase de Platense, que eliminó a River y avanzó a semifinales por segunda vez en su historia.
Este resultado tiene un significado especial para Platense, que en los años 70 fue uno de los clubes más relevantes del fútbol argentino, conquistando la Primera División en 1979 y participando en la Copa Libertadores.
La clasificación a las semifinales representa una oportunidad histórica, y uno de los grandes retos será mantener el rendimiento ante el poderoso San Lorenzo en la siguiente fase.
Mientras tanto, River, que ahora se enfocará en mejorar su rendimiento en la liga y buscar revancha en futuras competencias internacionales, tuvo en esta eliminatoria un reflejo de las dificultades que enfrentó en el semestre.
La derrota también pone de manifiesto la necesidad de fortalecer ciertos aspectos defensivos y tácticos para competir en lo más alto en un torneo altamente competitivo.
En resumen, la victoria de Platense en el Monumental no solo simboliza una hazaña deportiva, sino que también revitaliza las ilusiones de los clubes pequeños que sueñan con avanzar en el fútbol argentino y enfrentarse a gigantes en instancias decisivas.
La próxima semana, en el encuentro contra San Lorenzo, Platense buscará seguir sorprendiendo y escribir una de las historias más emocionantes del fútbol local en los últimos años.