El encuentro entre Lanús y Rosario Central en el Torneo Clausura generó controversias por un penal sancionado tras revisión del VAR y la expulsión de un jugador de Lanús, en un partido que marcó el regreso del público visitante en la Primera División argentina después de más de una década.

El reciente encuentro entre Lanús y Rosario Central en la segunda fecha del Torneo Clausura de la Liga Profesional de Fútbol en Argentina fue uno de los partidos más comentados en los medios deportivos de la región.

Además de significar la vuelta del público visitante a los estadios de Primera División tras una suspensión de 12 años, el duelo estuvo marcado por una polémica acción que impactó tanto a los aficionados como a los analistas del fútbol.

El polémico momento ocurrió a los 25 minutos del segundo tiempo, cuando el arquero de Lanús, Nahuel Losada, salió con firmeza y derribó en el área a Gaspar Duarte, jugador de Rosario Central.

La jugada generó inmediatamente la revisión del VAR, ya que había quienes consideraban que la caída del delantero visitante había sido simulada, mientras otros sostenían que fue una falta clara.

Tras analizar las imágenes y el audio del sistema de Video Assistant Referee, el árbitro Andrés Merlos sancionó penal a favor de Rosario Central.

El debate en torno a esa decisión se intensificó cuando en las imágenes se evidenció que Losada, al intentar despejar la pelota, salió de manera imprudente y terminó tocando en el pie del atacante, una acción que, según la revisión del VAR, fue suficiente para justificar el penal.

La jugada fue determinante para que Ángel Di María, figura del Canalla, convirtiera desde los 12 pasos y asegurara la victoria de su equipo.

Otra polémica se desencadenó cuando al momento de ejecutar el penal, Carlos Izquierdoz, capitán de Lanús, protestó airadamente y fue expulsado por el árbitro.

La expulsión del defensor causó revuelo dentro del equipo local y entre los fanáticos del conjunto granate. Izquierdoz, conocido por su liderazgo en el campo, expresó su disconformidad con la decisión y acusó a Merlos de parcialidad. Sus declaraciones posteriores al partido generaron sanciones por parte del Tribunal de Disciplina, que evalúa una posible suspensión de varios partidos.

Por otro lado, el rendimiento del equipo de Lanús también estuvo en el centro de atención desde antes del encuentro. Había llegado con cierta tensión tras la primera fecha del torneo, en la que perdió 1-0 ante Deportivo Riestra. En ese partido, el delantero Lautaro Acosta manifestó públicamente su desencanto por el arbitraje, acusando a Hernán Mastrángelo de favorecer a ciertos equipos y de no sancionar penal por una supuesta mano en una jugada en la área rival.

Acosta, que cuenta con 37 años y es una pieza clave en la historia del club, declaró: “Con este árbitro siempre pasa lo mismo. Cuando un equipo del poder dirige Hernán, no pasa nada. La situación se repite y estamos acostumbrados a que nos pase esto cuando juega Mastrángelo. No es casualidad”. Sus declaraciones generaron una gran repercusión, y poco después fue suspendido provisionalmente por el Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), en espera de una sanción definitiva.

Estas controversias reflejan la tensión que aún existe en el fútbol argentino respecto a la utilización del VAR y la imparcialidad de los árbitros en partidos decisivos.

La situación también se enmarca en una tradición de disputas y polémicas que han acompañado a la liga de ese país en los últimos años, donde las decisiones arbitrales son seguidas con atención por hinchas, jugadores y periodistas.

En definitiva, el partido entre Lanús y Rosario Central se convirtió en un ejemplo de cómo la tecnología y la gestión arbitral pueden generar tanto polémica como interés en el fútbol.

Mientras los clubes y las autoridades deportivas analizan los próximos pasos, será interesante observar cómo evoluciona la relación entre el VAR, los árbitros y los protagonistas de un deporte que, a pesar de su tradición, sigue en constante búsqueda de perfección y justicia en cada jugada.