Mumbai, 9 de julio — El dos veces medallista olímpico en lucha libre, Sushil Kumar, ha retomado oficialmente sus funciones en Northern Railway tras ser concedido en libertad bajo fianza, según fuentes cercanas a IANS.

La noticia ha causado revuelo en el país, ya que Kumar, considerado durante años como uno de los rostros más destacados de la lucha india, ha dado un giro sorprendente en su trayectoria al regresar a un entorno administrativo en lugar de las arenas deportivas.

Supuestamente, Kumar había estado bajo custodia judicial desde 2021, en relación con un caso de asesinato que conmocionó a la nación. Se le acusa presuntamente de haber estado involucrado en la muerte del también luchador Sagar Dhankar. La investigación en su contra todavía no ha concluido, y el proceso legal continúa en marcha, pero la decisión de otorgarle la libertad bajo fianza fue tomada por la Corte Suprema de Delhi, alegando que las demoras en el proceso judicial violaban sus derechos.

Según informes, Kumar se presentó en la oficina de trenes de Northern Railway en la semana pasada, vistiendo ropa formal y manteniendo un perfil bajo, en medio de un interés mediático bastante intenso.

La reubicación en el trabajo se realizó siguiendo las normativas internas del servicio, y las autoridades ferroviarias confirmaron su reinstalación en el puesto de Gerente Comercial Senior.

El regreso de Kumar ha dividido opiniones en la opinión pública. Por un lado, algunos críticos cuestionan la decisión de reincorporarlo en un puesto público, dado su presunto involucramiento en un crimen grave. Por otro lado, defensores argumentan que en un sistema judicial democrático, toda persona tiene derecho a la presunción de inocencia hasta que se demuestre su culpabilidad en un juicio justo.

Curiosamente, la carrera de Kumar ha sido un ejemplo de éxito y superación. Ganó una medalla de bronce en Beijing 2008 y una de plata en Londres 2012, consolidándose como uno de los deportistas más destacados en la historia de la lucha india.

Además, durante su apogeo, fue considerado un símbolo de la lucha y el espíritu olímpico en su país, ayudando a popularizar la disciplina en una nación donde el cricket domina la atención del público.

Supuestamente, algunos analistas históricos señalan que la vida de Kumar ha estado marcada por altos y bajos, y que su retorno a la vida pública, aunque controvertido, refleja también los desafíos del sistema judicial y la cultura deportiva en India.

La presencia de figuras como Kumar en puestos administrativos puede ser vista como una señal de que la vida pública y la justicia están en un proceso de reflexión y cambio.

Mientras tanto, el caso sigue abierto y las autoridades judiciales advierten que no se ha dictado ninguna sentencia definitiva. La comunidad deportiva y la sociedad en general están atentos a los próximos movimientos legales, que definirán el futuro de Kumar y su carrera, en un escenario que combina pasión, justicia y controversia.

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