El defensor argentino Cristian Romero logra su primer trofeo con Tottenham al ganar la Europa League 2025 en Bilbao, asegurando también su ingreso a la próxima Champions League y sumando un capítulo histórico para el club en su trayectoria europea.
Cristian Romero, destacado defensor argentino, dejó una marca imborrable en la historia de Tottenham al obtener en Bilbao la Europa League 2025, su primer título a nivel internacional con el club inglés.
Esta conquista representa un momento crucial en la carrera de Roma, que previamente había levantado diversos trofeos con la selección argentina y en clubes como Belgrano, Genoa y Atalanta, aunque nunca había logrado coronarse en una competición europea.
La final, disputada este miércoles en San Mamés, enfrentó a Tottenham con Manchester United, en un duelo que mantuvo a los aficionados en vilo. Con un marcador ajustado de 1 a 0 a favor del equipo londinense, el gol de la victoria fue producto de una jugada desafortunada de Luke Shaw en el primer tiempo, quien en un intento de despeje, convirtió en su propia meta.
Romero, con su liderazgo en la defensa, fue pieza clave en la resistencia que los Spurs protagonizaron durante todo el segundo tiempo, enfrentándose a un Manchester United que atacó sin descanso.
El partido fue una verdadera batalla táctica donde el fútbol argentino dejó su huella. Romero, con su habitual entrega y fortaleza física, fue el líder en despejes (8 en total), ganó 6 duelos y completó 14 de 15 pases precisos, defendiendo con garra y estrategia.
Además, fue elegido como el jugador del encuentro y levantó el trofeo, envuelto en la bandera argentina, con lágrimas de felicidad y orgullo.
Antes de enfocar en el aspecto deportivo, es importante destacar la historia que Romero trae desde sus raíces en Córdoba, donde comenzó su carrera en San Lorenzo.
Desde sus primeros días en clubes como Talleres y Belgrano, mostró un carácter de guerrero que hoy se evidenció en la cancha europea. Su mamá Rosa siempre le inculcó valores de esfuerzo y dedicación, que ahora se reflejan en cada paso que da.
La final de Bilbao no solo significó un logro deportivo, sino también un hito para Tottenham, que rompió una sequía de 17 años sin títulos en competiciones internacionales, dejando atrás la Copa de la Liga de 2008.
Romero, con su liderazgo y carácter, fue fundamental para que el equipo lograra cerrar una temporada dura en la Premier League, donde actualmente se ubica en la posición 17 con 38 puntos, lejos de los puestos clasificatorios a competiciones europeas por tabla de clasificación, pero asegurando su lugar en la próxima Europa League.
El técnico de Tottenham, Antonio Conte, ha expresado su satisfacción por el rendimiento del equipo, resaltando la entrega de Romero y del resto de los jugadores.
La celebración en Bilbao fue emotiva, con Romero siendo uno de los principales protagonistas, pero también mostrando su lado humano al consolar a Garnacho, quien lloraba de frustración tras la derrota.
Este triunfo no solo engrandece la carrera de Romero, sino que también sitúa a Tottenham en el mapa del fútbol europeo, con chances de seguir escalando en la élite continental.
La temporada culminará con el cierre de la Premier League y con la expectativa de que Romero siga siendo parte del proyecto londinense, aunque diversos medios apuntan a que podría considerarse una transferencia a La Liga, quizás al Atlético de Madrid de Diego Simeone.
Por ahora, Cristian Romero disfruta de la satisfacción de haber conseguido un título que quedó grabado en su memoria y en la historia del club. A principios de junio, viajará a Argentina para sumarse a la selección en las próximas Eliminatorias Sudamericanas, llevando consigo no solo su talento, sino también el orgullo de ser parte de un momento único que marcará su carrera para siempre.