El exdirigente de la IPL, Lalit Modi, ha recurrido a la Corte Suprema de India para que el BCCI asuma una multa de aproximadamente 135.000 euros impuesta por la ED, en medio de una disputa legal que remonta a 2009.

Mumbai, 29 de junio (supuestamente) - Lalit Modi, el expresidente de la Indian Premier League (IPL), ha llevado su caso ante la Corte Suprema de India en un intento por que el BCCI (Board of Control for Cricket in India) asuma una multa de aproximadamente 9,3 millones de euros, que le fue impuesta por la Oficina de Control de Prácticas Financieras (ED, por sus siglas en inglés).

La multa, supuestamente vinculada a supuestas irregularidades en la gestión de divisas durante la temporada 2009 de la IPL celebrada en Sudáfrica, fue emitida en su contra por las autoridades y ahora Modi busca que el máximo órgano judicial ordene al BCCI pagarla en su nombre.

Anteriormente, el Tribunal Superior de Bombay desestimó una petición de Lalit Modi en la que solicitaba que el BCCI se hiciera cargo de esta multa, alegando que las normas internas del organismo regulador requerían que la federación de cricket indemnizara a sus funcionarios en casos de pérdidas o gastos relacionados con sus funciones oficiales.

La decisión, supuestamente, dejó en claro que las disposiciones del BCCI no obligan a la organización a cubrir estos gastos, y además, ordenó a Modi pagar una multa de 1.200 euros por los costos judiciales.

En su recurso presentado ante la Corte Suprema, Lalit Modi argumentó que, según los estatutos del BCCI y el Memorando de Constitución, la organización tiene la obligación de indemnizar a sus oficiales por los gastos incurridos en el ejercicio de sus funciones, siempre que estos sean justificados.

En particular, citó la regla 34 del reglamento interno del BCCI, en la que supuestamente se estipula que los cargos y gastos relacionados con la gestión de la liga y el críquet en general deben ser asumidos por la federación.

Modi, quien fue vicepresidente del BCCI desde 2005 hasta 2010 y presidente de la IPL entre 2007 y 2010, también criticó lo que él calificó como un trato