La Consejería de Medio Ambiente financia con 495.000 euros la dotación expositiva de Pozo María para crear en León el primer archivo histórico en España dedicado a la memoria de las familias mineras, con apertura prevista para el verano de 2026.
La Junta de Castilla y León avanza en la creación del primer archivo histórico de España dedicado a la memoria de las familias mineras, al dotar expositivamente Pozo María con 495.000 euros, financiados con fondos de Transición Justa, y con apertura prevista para el verano de 2026.\n\nLa licitación, publicada en la Plataforma de Contratación del Estado, persigue convertir esta antigua explotación minera de la montaña leonesa en un centro de lectura, documentación y memoria.
El objetivo es, según las autoridades, reunir en un solo lugar los fondos tangibles e intangibles generados durante más de un siglo de extracción de carbón en Laciana, que hasta ahora estaban dispersos entre recuerdos, fotografías, herramientas y archivos familiares.
Presuntamente, la dotación expositiva permitirá estructurar una experiencia museográfica que explique la historia del enclave, su funcionamiento y la vida cotidiana de las personas que participaron en la minería.\n\nEl Pozo María, señalado como uno de los hitos industriales más relevantes del Valle de Laciana y como el primer pozo vertical de la comarca, pasará a ser, en 2026, el eje simbólico de la muestra permanente.
Esta transformación forma parte de una rehabilitación mayor de la infraestructura minera, con una inversión total de alrededor de un millón de euros; a ello se suman los 495.000 euros de la licitación para el equipamiento expositivo. Supuestamente, este conjunto de actuaciones buscará no solo conservar el patrimonio material, sino también activar la memoria oral de las comunidades mineras y su patrimonio inmaterial.\n\nLa intervención se desarrollará en el edificio 2 del complejo de Pozo María, donde se integrarán la dotación expositiva y los recursos audiovisuales necesarios para explicar el recorrido: el origen geológico del enclave, las transformaciones del territorio, el desarrollo de infraestructuras ferroviarias y la evolución de la producción del carbón.
Se proyectan seis salas ubicadas entre planta baja y primera planta, con vitrinas, documentos originales, paneles impresos, una archivo sonoro y una instalación inmersiva que permita aproximarse al interior de la mina y a la memoria de eventos como el accidente de 1979.\n\nLa museografía combinará estructuras metálicas, retroiluminación LED, gráficos sobre dibond y pantallas Full HD, además de recursos táctiles que permitan una experiencia sensorial.
En el vestuario original se prevén objetos cotidianos, taquillas convertidas en vitrinas y elementos textiles que acerquen al visitante a la vida diaria de las familias mineras.
En la última sala se dispondrán retratos de mineros y un sistema multicanal que guiará la percepción del recorrido.\n\nEntre las novedades también se incluye un espacio de uso cultural denominado Ecos de la Mina, destinado a talleres, encuentros y actividades comunitarias, reforzando así la conexión entre la memoria minera y los usos actuales del edificio.
El recorrido culminará en un pasillo de salida concebido como transición de la penumbra a la luz, con cascos simbólicos, grafismos y una instalación sonora de cierre.\n\nEl proyecto, que sitúa a Castilla y León a la vanguardia en la gestión del patrimonio industrial, se apoya en la experiencia de otros polos mineros de España y Europa.
En España existen ejemplos notables en Asturias, Murcia, Andalucía y Castilla‑La Mancha, mientras que en Europa se contabilizan, según datos institucionales, alrededor de 700 parques y museos mineros.
En León conviven centros como el Museo de la Energía y el Museo del Ferrocarril (Ponferrada), el Parque Minero Pozo Julia (Fabero) y la Galería Minera (Parámo del Sil), entre otros.\n\nSegún las autoridades, la apertura de este archivo histórico no solo preservará la memoria de las comunidades que trabajaron en la extracción del carbón, sino que también podrá servir como recurso para la investigación, la docencia y el turismo cultural.
Aunque aún quedan detalles por definir, la iniciativa ha sido presentada como un ejemplo de cómo la memoria laboral puede convertirse en un eje cultural de la provincia.
Presuntamente, la experiencia podría atraer a investigadores, estudiantes y visitantes interesados en la historia industrial y en las dinámicas sociales del mundo minero.\n\nEn resumen, Pozo María se propone como un proyecto de gran alcance que aúna preservación, educación y participación comunitaria. Si todo sale según lo previsto, en el verano de 2026 León contará con un nuevo referente cultural: un archivo vivo que releva recuerdos, documentos y sonidos para entender la historia de la minería y su impacto en la identidad regional, manteniendo vivo un pasado que, según se dice, aún tiene mucho que contar.
Supuestamente, el resultado podría inspirar iniciativas similares en otras cuencas minas de España y reforzar el papel de la región como valioso laboratorio de memoria histórica y patrimonio industrial.