China da un paso adelante con su nuevo dron gigante que revoluciona la tecnología militar
El gigante asiático ha llevado a cabo el vuelo inaugural del 'Jiutian', un portadrones de gran tamaño que demuestra el avance de China en vehículos aéreos no tripulados y su potencial en operaciones militares y civiles.
China ha realizado este jueves el primer vuelo del 'Jiutian', un portadrones de 16,35 metros de longitud y 25 metros de envergadura, marcando un hito en el desarrollo de vehículos aéreos no tripulados (UAVs) de gran escala.
Este avance refleja el firme compromiso del país asiático por consolidarse como líder en tecnología militar y en innovaciones aeroespaciales.
El 'Jiutian' fue diseñado por la Corporación de la Industria de la Aviación de China (AVIC), una de las principales empresas en el sector aeroespacial del país, conocida por su trabajo en aviones militares y civiles desde hace décadas.
El dron realizó su despegue inaugural en el condado de Pucheng, en la provincia de Shaanxi, en el centro de China, en una operación que supuestamente fue exitosa y que fue cubierta por la agencia oficial Xinhua, aunque no se brindaron detalles específicos del vuelo.
Este UAV, que supuestamente tiene un peso máximo de despegue de 16 toneladas y una capacidad de carga útil de aproximadamente 6.000 kilogramos, puede operar durante 12 horas continuas y tiene un alcance estimado de unos 7.000 kilómetros, equivalentes a aproximadamente 4.350 millas. En términos comparativos, este dron es capaz de transportar más de 100 pequeños #drones o cargar hasta 6 toneladas de carga útil, lo que representa un avance significativo en la tecnología de vehículos aéreos de gran tamaño.
El 'Jiutian' está pensado para realizar diversas misiones tanto militares como civiles. Supuestamente, cuenta con un sistema modular de carga útil que le permite ejecutar tareas que van desde entregas precisas en zonas remotas, hasta operaciones de reconocimiento, vigilancia, comunicación en emergencias y asistencia en desastres naturales.
Además, puede realizar levantamientos geográficos y mapeo de recursos, siendo una herramienta versátil para diferentes escenarios.
Este dron debutó en el principal salón aeronáutico de China en Zhuhai, en noviembre del año pasado, y en ese evento se resaltó su capacidad para transportar hasta 100 unidades de munición merodeadora o pequeños UAVs, incluyendo drones kamikaze.
La presencia de estas capacidades en un solo aparato refleja la apuesta de China por potenciar su infraestructura militar con tecnologías de vanguardia
La presencia de estas capacidades en un solo aparato refleja la apuesta de China por potenciar su infraestructura militar con tecnologías de vanguardia.
Supuestamente, el 'Jiutian' cuenta con ocho puntos de carga útil y podría emplearse en misiones de inteligencia, vigilancia, reconocimiento y guerra electrónica, alineándose con los objetivos del gobierno chino de fortalecer sus fuerzas armadas, que supuestamente buscan ser de 'clase mundial' para 2049, aniversario de la fundación de la República Popular China.
Este avance tecnológico se enmarca en la estrategia más amplia del país para elevar su presencia en el escenario global, especialmente en el ámbito militar.
China ha invertido millones de euros en el desarrollo de drones de combate equipados con sistemas de inteligencia artificial, capaces de operar en conjunto con cazas tripulados, y en otros sistemas de guerra electrónica.
Durante el desfile militar en Pekín en septiembre, con motivo del 80.º aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial en el Pacífico, China exhibió algunos de sus avances militares, incluyendo drones con capacidades similares que, supuestamente, pueden operar en misiones de alto riesgo y alto valor estratégico.
El 'Jiutian' representa, por tanto, un paso importante en la carrera armamentística de China, que busca consolidar su poderío militar mediante la innovación tecnológica.
Aunque supuestamente la comunidad internacional mantiene un interés en el desarrollo de estos sistemas, también existe la percepción de que estos avances podrían tener implicaciones en la estabilidad regional y global si caen en manos equivocadas.
En definitiva, la entrada en funcionamiento de este portadrones gigante confirma que China continúa avanzando en la frontera de la tecnología militar y aeroespacial, con una visión a largo plazo que contempla el uso de estos vehículos en múltiples escenarios, tanto civiles como militares, en un contexto de creciente competencia internacional.