La iniciativa de protección civil fortalece la formación en extinción de incendios en zonas urbanas y forestales
La Junta de Castilla y León continúa avanzando en su programa de capacitación para mejorar la respuesta ante incendios en áreas de interfaz urbano-forestal, con una inversión significativa y una serie de cursos especializados dirigidos a profesionales del sistema de protección civil.
La Junta de #Castilla y León refuerza su compromiso con la protección y conservación de sus espacios naturales mediante la implementación de un ambicioso programa de formación dirigido a profesionales que intervienen en incendios en zonas de interfaz urbano-forestal.
Presuntamente, esta iniciativa forma parte de un plan estratégico que busca reducir significativamente la magnitud de los #incendios forestales en la región, que en años anteriores han causado daños considerables en ecosistemas y comunidades.
El programa, que ha recibido una inversión cercana a los 225.000 euros, supuestamente pretende preparar a los efectivos de protección civil, bomberos y técnicos especializados en la gestión de emergencias para actuar de manera más eficiente y segura durante los incendios que amenazan tanto áreas boscosas como zonas urbanas cercanas.
La formación está diseñada para elevar las capacidades tácticas y operativas de los profesionales, así como para mejorar la coordinación entre diferentes entidades y cuerpos de emergencia.
En 2024, Castilla y León sufrió una de sus peores temporadas de incendios forestales en la última década, con más de 15.000 hectáreas afectadas, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica. La mayoría de estos incendios se produjeron en zonas de interfaz urbano-forestal, donde la densidad de construcciones y la presencia humana complican las operaciones de extinción y aumentan los riesgos para las personas y bienes.
El programa formativo se estructura en varias fases y cursos específicos. La primera línea de acción ha consistido en la realización de cursos sobre técnicas de autoprotección, seguridad y actuación en incendios en la interfaz, dirigidos a equipos multidisciplinares.
Estas sesiones se llevaron a cabo en diferentes localidades, incluyendo Zamora, Vilviestre del Pinar, Baltanás y Arévalo, con el fin de abarcar toda la región.
Por otro lado, se han impartido también cursos especializados en operaciones de extinción, que han tenido lugar en recintos feriales como IFEZA en Zamora y en Riello, León.
Técnicos de protección civil y personal de diputaciones provinciales
En estas últimas ediciones, han participado más de 27 profesionales, entre bomberos municipales, técnicos de protección civil y personal de diputaciones provinciales, que han recibido un entrenamiento intensivo de más de 30 horas.
Supuestamente, estas jornadas combinan formación teórica y práctica, incluyendo simulacros en entornos controlados. El ejercicio más reciente, realizado en Riello, contó con la participación de cinco autobombas, vehículos todoterreno, un puesto de mando avanzado y recursos de diferentes organismos, con el objetivo de simular un escenario realista de incendio en la interfaz urbano-forestal.
La directora de la Agencia de #Protección Civil y Emergencias, Irene Cortés Calvo, afirmó durante la clausura del simulacro que esta formación es fundamental para mejorar la respuesta ante emergencias y reducir el impacto de los incendios.
Además, destacó que la inversión de la Junta en estos cursos fortalecerá la capacidad de respuesta en futuras campañas, permitiendo además recopilar lecciones aprendidas y propuestas de mejora para optimizar los protocolos.
Presuntamente, la formación continuará en los próximos meses con las dos jornadas restantes del curso de autoprotección. Se espera que estas acciones contribuyan a crear un sistema de respuesta más cohesionado y preparado para afrontar los desafíos de los incendios en la región, que, según expertos, podrían aumentar en frecuencia y severidad debido al cambio climático y a la gestión forestal.
En definitiva, la iniciativa de protección civil de Castilla y León busca no solo capacitar a los profesionales, sino también concienciar a la población sobre la importancia de adoptar medidas preventivas y colaborar en la protección de sus entornos naturales y urbanos.
La región continúa así su camino hacia una gestión más eficiente y segura frente a las amenazas de los incendios forestales, con un enfoque que combina formación, inversión y coordinación interinstitucional.