El Ayuntamiento de Valencia ha acordado rehabilitar el Monumento a las víctimas de las riadas de 1982 y rendir homenaje a los fallecidos con una serie de propuestas, incluyendo una llama permanente y la inscripción de nombres.
El 20 de diciembre de 2024, el Ayuntamiento de Valencia tomó una significativa decisión en el Pleno municipal, acordando la rehabilitación del Monumento en memoria de las víctimas de las inundaciones ocasionadas por la dana.
Esta obra, creada por el escultor valenciano Ramón de Soto Arándiga, fue inaugurada en octubre de 1982 y conmemora a aquellos que perdieron la vida en la trágica riada de 1957, así como a otras víctimas de eventos similares.
La nueva propuesta incluye la instalación de un pebetero que tendrá una llama permanente, simbolizando un recuerdo constante hacia los fallecidos. Además, se plantea inscribir los nombres de las víctimas en piedra labrada, lo cual permitirá que sus memorias perduren para las futuras generaciones.
El monumento está ubicado en la avenida de Aragón, un lugar significativo para los ciudadanos de Valencia. Desde su inauguración, este monumento ha servido no solo como un homenaje, sino también como un recordatorio de los devastadores efectos que las inundaciones pueden tener en la comunidad.
El acuerdo, tomado mayoritariamente por el equipo de gobierno, también instó a denominar la explanada donde se encuentra el monumento como 'Plaza de las víctimas de la dana de 29 de octubre de 2024', lo que subraya la importancia de recordar y honrar a quienes sufrieron en esas fechas fatídicas.
La historia de la zona es trágica y compleja. El 29 de octubre de 2024, una serie de inundaciones devastadoras causaron grandes daños en Valencia, trasladando al Consejo Municipal a discutir formas de apoyar a los afectados.
En este contexto, se discutieron varias mociones en el Pleno, donde partidos de la oposición como Compromís y Socialista presentaron diversas acciones para mitigar los efectos de la dana.
Entre las propuestas se encontraba la creación de una Oficina de Promoción Económica destinada a ayudar a los sectores comercial, industrial y agrario en las áreas más afectadas.
De acuerdo con el Grupo Socialista, es vital que el Ayuntamiento implemente un Plan de Recuperación que pueda canalizar los recursos necesarios, estimado en 84 millones de euros.
Este plan busca abordar las necesidades económicas y sociales urgentes de aquellos que sufrieron pérdidas y daños debido a la dana.
Desde la inauguración del monumento, ha sido testigo de la resiliencia de la población valenciana. En 1982, al cumplirse 25 años del desastre de 1957, la ciudad decidió no olvidar, mediante la creación de un símbolo que recordara el dolor y la historia.
La obra de Soto Arándiga, que se eleva a 16 metros de altura, se erige sobre la explanada de la antigua Estación de Aragón, y su diseño esquemático y austero refleja la solemnidad del evento que conmemora.
La reciente moción también incluyó la necesidad de mejor comunicación e información sobre las ayudas disponibles para los afectados por la dana de 2024.
Esto, junto a la reivindicación de la memoria histórica, refuerza el compromiso del Ayuntamiento para no solo recordar a aquellos que sufrieron, sino también para construir un futuro más sólido y estructurado en la gestión de emergencias.
La comunidad, además de recordar a las víctimas, se unifica en torno a la necesidad de crear un ambiente seguro y preparado frente a eventos climáticos extremos.