El Ayuntamiento de Valencia facilitará el acceso a bicicletas no identificadas a organizaciones sin fines de lucro para su uso social.

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El 20 de septiembre de 2024, Valencia ha dado un paso significativo hacia el bienestar social al aprobar un acuerdo por parte de la Junta de Gobierno Local, que permite a las entidades sin ánimo de lucro solicitar bicicletas no reclamadas que han sido retiradas de la vía pública por la Policía Local.

Esta iniciativa permitirá que las bicicletas, que de otro modo quedarían abandonadas en los depósitos municipales de La Torre y Poble Nou, sean recuperadas para un uso solidario.

La normativa vigente establece que, tras tres meses de haber sido retiradas, las bicicletas que no han sido identificadas pueden ser entregadas a organizaciones sin fines de lucro.

Este nuevo procedimiento es una excelente oportunidad para que las entidades que trabajan en favor de diversas causas sociales puedan acceder a estos vehículos, promoviendo así el uso de la bicicleta como medio de transporte sostenible y accesible.

Las organizaciones interesadas deberán presentar su solicitud en febrero de cada año, cumpliendo con ciertos requerimientos.

Específicamente, deberán incluir un NIF y demostrar su inscripción en el Registro autonómico de entidades sin ánimo de lucro.

Este enfoque sistemático facilita la gestión y distribución de las bicicletas, evitando cualquier tipo de favoritismo y asegurando que todos los interesados tengan la oportunidad de beneficiarse de esta iniciativa.

Históricamente, Valencia ha sido una ciudad que promueve la movilidad sostenible y el uso de bicicletas.

En los últimos años, se ha trabajado para convertir a la ciudad en un espacio más amigable para los ciclistas.


Este esfuerzo se traduce no solo en la mejora de la infraestructura ciclista, sino también en la implementación de programas que fomenten su uso.

Además, el Artículo 37 de la Ordenanza Municipal de Movilidad establece claramente las pautas para la recuperación de bicicletas, lo que respalda este acto de generosidad del Ayuntamiento.

La distribución de las bicicletas será equitativa, basándose en un informe que elaborará el Servicio de Policía Local, donde se especificará el número total de bicicletas disponibles y su estado.

Esto garantiza que todas las entidades que soliciten bicicletas recibirán una parte justa según las condiciones de los vehículos.

Esta acción no solo tiene el fin de permitir el acceso a un medio de transporte, sino que también busca fomentar valores de solidaridad y cooperación entre la comunidad.

Las bicicletas recuperadas podrán servir para fines diversos: desde facilitar la movilidad de personas en riesgo de exclusión, hasta apoyar diferentes proyectos de desarrollo comunitario que promuevan un estilo de vida más saludable y sostenible.

En conclusión, la aprobación de este procedimiento por parte del Ayuntamiento de Valencia representa un importante avance en la reutilización de recursos públicos y en el apoyo a las organizaciones que trabajan por el bienestar social.

Valencia demuestra una vez más su compromiso con el desarrollo social y la movilidad sostenible, estableciéndose como un modelo a seguir para otras ciudades.