El Ayuntamiento de Valencia ha adjudicado la redacción de un ambicioso proyecto de renaturalización en la avenida del Oeste y sus alrededores, buscando revitalizar la zona comercial y mejorar la calidad del espacio urbano.
El pasado 11 de octubre de 2024, el Ayuntamiento de Valencia dio un paso importante hacia la revitalización urbana y medioambiental de la ciudad al aprobar la adjudicación del contrato para la redacción del proyecto de renaturalización de la avenida del Oeste, la plaza de San Agustín y la calle San Vicente.
Esta iniciativa, que cuenta con un presupuesto de aproximadamente 385.990 euros (incluido IVA), busca transformar un área clave de Valencia en un espacio más accesible y agradable tanto para residentes como para comerciantes, en un plazo de cinco meses y quince días.
El concejal Juan Carlos Caballero, portavoz del equipo de Gobierno, ha señalado que la decisión responde a una demanda que los ciudadanos y las asociaciones de comerciantes han expresado en diversas ocasiones.
“Este es un enclave estratégico que necesita ser recuperado como un espacio comercial y urbano fundamental”, destacó el concejal.
La intervención no solo se basa en embellecer la zona, sino que también implica la creación de nuevas dinámicas para incrementar la actividad económica y social.
El ambicioso proyecto denominado ‘Escalera de Colores’, que fue el ganador del concurso de ideas lanzado por el Ayuntamiento en diciembre de 2021, tiene como objetivo revitalizar una superficie urbana de 29.000 metros cuadrados.
Este diseño busca no solo aumentar la vegetación en la zona, sino también promover una mejor experiencia visual mediante el uso del color de las diferentes especies arbóreas, su floración y los cambios que estas sufren a lo largo del año.
Como parte de la intervención, se están considerando medidas para promover la sostenibilidad, incluyendo el aumento del espacio para la vegetación y el diseño de aceras más amplias en la avenida del Oeste.
También se planean la creación de plazas y espacios de encuentro en conjunción con las calles perpendiculares, como una forma de fomentar la interacción social.
Además, se prevé que la plaza de San Agustín esté separada del tráfico vehicular a través de jardineras y nueva flora, contribuyendo a crear un ambiente más relajado y seguro para los peatones.
Los ciudadanos han expresado su entusiasmo por este proyecto tras una reunión a principios de año con el concejal de Urbanismo, Vivienda y Licencias, Juan Giner.
Al recibir las consideraciones de las asociaciones de vecinos y de comerciantes, el edil subrayó el compromiso del Ayuntamiento para escuchar y hacer eco de las necesidades de la comunidad.
“Damos inicio a un proyecto que responde a las expectativas de los vecinos y los comerciantes en esta emblemática zona de la ciudad”, agregó.
Además, el juego y el paseo están en el centro del concepto de diseño, buscando generar pequeñas zonas de estancia que sean accesibles y seguras, y mejorando el alumbrado público para incrementar la percepción de seguridad en la zona.
Con esta actuación, el Ayuntamiento de Valencia no solo pone en marcha una obra urbanística, sino que también trabaja para sentar las bases de una ciudad más habitable y sostenible, en la que la vegetación y el espacio público jueguen un rol crucial en la vida cotidiana de sus habitantes.