Valencia implementa el primer ciclobarrio de la ciudad en Russafa, promoviendo el uso de la bicicleta y mejorando la movilidad urbana.
El 19 de septiembre de 2024, el concejal de Seguridad y Movilidad de Valencia, Jesús Carbonell, presentó la adaptación de Russafa como el primer ciclobarrio de la ciudad.
Este innovador concepto busca fomentar el uso de la bicicleta en zonas residenciales, particularmente en áreas donde la infraestructura para ciclistas es limitada.
Russafa, famosa por su rica historia y vibrante cultura, ha sido elegida por su disposición geográfica, que favorece un tráfico calmado gracias a su intrincado entramado de calles.
El objetivo del ciclobarrio es crear un ambiente más seguro para los ciclistas y otros vehículos de movilidad personal, estableciendo una velocidad máxima de 20 km/h en toda el área.
Esta medida se enmarca dentro de la Semana de la Movilidad, un evento que promueve alternativas de transporte sostenibles y la reducción del uso del automóvil.
Durante esta semana, se están realizando trabajos de señalización que indicarán la entrada al ciclobarrio y reforzarán el mensaje de coexistencia entre ciclistas y conductores.
Las vías que conforman el ciclobarrio abarcan un perímetro que incluye la avenida Regne de València y varias calles como Maties Perelló, Els Centelles, Filipines, Gibraltar y la Gran Vía de Les Germanies.
Asimismo, se introducirá una nueva señalización vertical en las entradas al barrio, recordando a todos los usuarios de la vía la importancia de respetar la prioridad de la bicicleta.
Esta iniciativa también contempla la creación de tramos unidireccionales que conectarán el carril bici de Filipines con calles adyacentes, como Literat Azorín, Puerto Rico y Buenos Aires.
Además de facilitar la movilidad ciclista, el plan incluye una regulación de estacionamiento en la calle Filipines, entre Literat Azorín y Buenos Aires, con el fin de desincentivar el uso del automóvil y reducir la congestión del tráfico en el interior del barrio.
Se habilitarán aproximadamente 20 nuevas plazas de aparcamiento regulado, también conocidas como 'zona azul', que permitirán un flujo de vehículos más ordenado.
La implementación del ciclobarrio en Russafa no es solo un paso hacia la sostenibilidad, sino también una evolución en la forma en que se concibe y se utiliza el espacio urbano.
En el pasado, Valencia ha definido su identidad como una ciudad ciclable, con un crecimiento sostenido en el uso de la bicicleta entre los ciudadanos.
Con esta medida, se espera no solo aumentar la cantidad de ciclistas, sino también inspirar a otras áreas de la ciudad a adoptar iniciativas similares.
El concejal Carbonell sostiene que "Russafa es el lugar ideal para esta transformación debido a su estructura y su comunidad comprometida con la movilidad sostenible". Así, Valencia continúa su camino para convertirse en una ciudad más verde y accesible, en línea con las tendencias modernas de urbanismo responsable y ambientalmente consciente.