Dos agentes de la Policía Local de València intervinieron exitosamente para salvar a un bebé de 11 días que presentaba signos de asfixia en el barrio de Montolivet.
El pasado 10 de diciembre de 2024, un difícil y angustiante suceso tuvo lugar en una vivienda del barrio de Montolivet, en la ciudad de Valencia, donde dos agentes de la Policía Local demostraron una destacada actuación al salvar la vida de un recién nacido.
Según informes obtenidos, la situación se desató cuando se recibió una llamada urgente al Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) de la Generalitat, alertando que un bebé de solo 11 días de vida se había atragantado con su propio vómito y no estaba respirando.
Los agentes de la Comisaría de Proximidad de Ruzafa, ante la gravedad de la emergencia, se dirigieron de inmediato al hogar, donde encontraron a la madre con su bebé en brazos, en un estado de conmoción y angustia.
El pequeño presentaba evidentes signos de falta de oxígeno, con un tono azulado en su piel, lo que incrementó la urgencia del momento. En este contexto crítico, la rápida intervención de los policías se tornó crucial para revertir la situación.
Con la coordinación del CICU, los agentes instruyeron a la madre sobre las maniobras a seguir. Procedieron a colocar al bebé boca abajo sobre su brazo para intentar liberar las vías respiratorias y estimular su cuerpo. Este tipo de maniobra, conocido en emergencias pediátricas, es vital para despejar obstrucciones y facilitar la respiración en casos de atragantamiento.
Después de varios intentos, el esfuerzo conjunto dio resultado y el bebé comenzó a llorar, recuperando así la capacidad de respirar. La llegada del Servicio de Asistencia Médica de Urgencia (SAMU) fue inmediata, consolidando la estabilización inicial que habían logrado los agentes.
Nuevo jefe superior de Policía de Aragón designado por Grande-Marlaska
El comisario principal Florentino Marín Parra ha sido nombrado como el nuevo jefe superior de Policía de Aragón, en sustitución de Juan Carlos Hernández Muñoz. Marín Parra cuenta con una amplia trayectoria en la Policía Nacional y ha ocupado diversos cargos de responsabilidad.Estos solicitaron además una escolta para llevar al lactante de manera urgente al Hospital Doctor Peset, donde se le brindaron cuidados médicos adicionales.
Este caso es un recordatorio del impacto que pueden tener las intervenciones rápidas y bien coordinadas en situaciones críticas. La formación de los agentes de la Policía Local les permitió actuar con eficacia y valentía en un momento en que la vida de un recién nacido estaba en juego.
Históricamente, Valencia ha sido testigo de numerosas intervenciones heroicas por parte de sus fuerzas de seguridad. Los agentes no solo se limitan a hacer cumplir la ley, sino que también están entrenados para responder a emergencias que pueden afectar a la comunidad, independientemente de su naturaleza.
La labor que desempeñan día tras día es esencial para mantener la seguridad y la confianza de la ciudadanía. Este suceso, además de ser un acto de heroísmo, reafirma el compromiso que tienen los cuerpos de seguridad hacia el bienestar de la sociedad.
Con cada operación exitosa como esta, se construye una relación de respeto y agradecimiento entre los ciudadanos y las fuerzas del orden público, recordándonos que, a veces, la vida de una persona depende de la rápida y efectiva actuación de aquellos dispuestos a ayudar.