La ciudad de Valencia llevará a cabo una extensa campaña de poda y mantenimiento de árboles en diez barrios durante agosto, lo que representa un compromiso con el bienestar y la belleza del entorno urbano.
El próximo mes de agosto, la ciudad de Valencia continuará con su campaña de conservación y mantenimiento del arbolado urbano, poniendo énfasis en la poda de más de 400 árboles.
Esta labor se llevará a cabo en diez barrios de la capital, como Mestalla, Aiora, Arrancapins, La Punta, Trinitat, La Torre, Patraix y Campanar.
La Concejalía de Parques y Jardines, bajo la dirección de Juanma Badenas, segundo teniente de alcalde, ha puesto en marcha este programa intensivo como parte de su compromiso con el cuidado del medio ambiente en la ciudad.
La intervención contempla la poda de diversas especies arbóreas, incluyendo 70 ficus en la avenida del Port, 50 árboles de paraíso (Melia azedarach) en las zonas de Aiora y Arrancapins, y 88 moreras sin fruto (Morus alba 'Fruitless') en La Punta y La Torre.
Además, se atenderán 45 palmeras datileras en Trinitat, 32 olmos en Campanar y 93 hibiscos de Norfolk también en Trinitat.
Este esfuerzo por el bien de los espacios públicos refleja la importancia de la salud y estética del arbolado urbano.
Badenas ha remarcado que estas tareas son fundamentales no solo para realzar la belleza de las áreas verdes, sino también para garantizar la seguridad pública al eliminar ramas muertas o peligrosas.
Cada barrio tiene un plan específico que aborda las particularidades de su entorno arbóreo, lo que contribuye a una mejora general en el bienestar de todos los valencianos.
Además de la poda, se realizarán otras actividades en distritos como Ciutat Vella, L'Eixample, Extramurs, La Saïdia y Pla del Real.
Estas incluirán el riego del arbolado, control de la vegetación y retirada de tutores.
La atención se extenderá también a Campanar, L'Olivereta, Patraix, Jesús y Quatre Carreres, donde se aplicarán prácticas similares para gestionar el crecimiento vegetal y llevar a cabo podas específicas.
La ciudad no se limita a estos distritos, ya que se incluyen también intervenciones en Rascanya, Benicalap, y varias zonas de Pobles del Nord, Oest y Sud.
Estas áreas se beneficiarán de un riego intensivo de sus espacios arbolados, control de vegetación invasiva, y técnicas de poda que priorizan la salud de los árboles.
Por último, los distritos de Poblats Marítims, Camins al Grau, Algirós y Benimaclet también recibirán este tipo de cuidados, lo que generará un impacto positivo en el paisaje urbano y en la calidad de vida de sus residentes.
El enfoque está en mantener y enriquecer el entorno natural de la ciudad, asegurando que se continúe fortaleciendo el patrimonio verde de Valencia.
El compromiso de la administración local con estas intervenciones refuerza la urgencia de cuidar los espacios verdes, no solo desde una perspectiva estética, sino también por su papel fundamental en la sostenibilidad y en la mejora de la calidad del aire.
Cada acción realizada para revitalizar las áreas verdes es un paso hacia un futuro más sostenible para Valencia, colocando el bienestar de sus habitantes en el centro de la agenda.
La infraestructura vegetal de la ciudad es esencial, y cada esfuerzo en su mantenimiento contribuye a crear un Valencia más verde y saludable.