Alcaldes y alcaldesas europeas se reúnen en Valencia para abordar los retos del cambio climático y promover la sostenibilidad urbana.

El 21 de junio de 2024, en la capital de Valencia, se llevó a cabo una importante reunión en la que alcaldes y alcaldesas europeas se dieron cita para abordar los retos del cambio climático y trabajar juntos por la sostenibilidad urbana.

El Palau de la Música fue el escenario elegido para la València Cities Climate Week, que se extendió durante los días 25, 26 y 27 de junio.

En este evento, la alcaldesa de València, María José Catalá, tuvo un papel destacado junto al director general adjunto de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Patrick Child.

Valencia, Capital Verde Europea 2024, es una de las 100 ciudades europeas comprometidas a ser climáticamente neutras en emisiones para el año 2030. Por ello, este encuentro resultó de vital importancia para intercambiar conocimientos y promover acciones que impulsen la sostenibilidad urbana.

La alcaldesa Catalá resaltó la responsabilidad de la ciudad como anfitriona de la València Cities Climate Week y la importancia de ser un referente en políticas de medio ambiente.

Durante las jornadas, se llevaron a cabo diversas conferencias y plenarios en los que participaron alcaldes y alcaldesas de ciudades europeas comprometidas con la lucha contra el cambio climático.

Además, se destacó la importancia de la colaboración entre autoridades locales, universidades, empresas y ciudadanos para lograr la neutralidad climática.

En la mesa de trabajo sobre "Ciudades inteligentes y climáticamente neutras", la alcaldesa María José Catalá compartió experiencias con representantes de ciudades españolas como Madrid, Zaragoza, Valladolid y Vitoria-Gasteiz.

Esta reunión, que contó con el cierre del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, reafirmó el compromiso de las ciudades y regiones en avanzar hacia la neutralidad climática y promover un futuro sostenible para todos.

En un contexto global donde el cambio climático representa uno de los principales desafíos para la humanidad, la colaboración y el intercambio de buenas prácticas entre ciudades se convierten en herramientas clave para enfrentar esta crisis y construir un mundo más sostenible y resiliente.