El Ayuntamiento de València ha implementado medidas de protección para preservar el patrimonio histórico durante las festividades de Fallas

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El Ayuntamiento de València ha completado la instalación de vallas de protección alrededor de varios monumentos y edificios históricos de la ciudad, como parte del protocolo establecido para salvaguardar el patrimonio durante las celebraciones de las Fallas 2025.

Esta medida se ha implementado de manera anticipada, con el objetivo de tener todo listo antes de la llegada de este fin de semana, cuando se llevarán a cabo diversas actividades festivas, incluyendo la instalación de carpas y la celebración de verbenas.

Entre los monumentos que se beneficiarán de esta protección están la Iglesia de los Santos Juanes, las Covetes de San Juan, así como las puertas de las Torres de Serranos y las Torres de Quart.

También se ha incluido la Galería del Tossal y la Torre de San Bartolomé, situada en la calle Serrans, junto a la plaza de Manises. La protección de estos edificios se mantendrá hasta el 20 de marzo, fecha en la que se procederá a la retirada de las vallas.

El concejal de Acción Cultural, Patrimonio y Recursos Culturales, José Luis Moreno, explicó el pasado 28 de febrero que este año se había decidido adelantar la colocación de las vallas para garantizar que todo estuviera listo para el 4 de marzo, lo que coincide con el inicio de las festividades falleras.

Moreno también destacó que el protocolo es un documento vivo que se adapta a las necesidades, incorporando más edificios a proteger en comparación con años anteriores.

Esto permitirá modificar las medidas según las incidencias de vandalismo y otros comportamientos incívicos que puedan surgir durante las celebraciones.

El protocolo establece estrictas medidas de protección para Bienes de Interés Cultural (BIC) y Bienes de Relevancia Local (BRL) en relación con las actividades festivas.

Por ejemplo, se prohíbe cualquier tipo de anclaje en los edificios o en su cercado perimetral y se requiere una distancia suficiente entre cualquier instalación temporal y los monumentos protegidos.

Esto incluye carpas, quioscos, y otros elementos similares que puedan ser montados en el entorno de estos edificios.

Asimismo, se debe considerar que para la autorización de cualquier tipo de puesto o quiosco provisional, se tendrán en cuenta los alrededores de edificios significativos como la Lonja de Mercaderes, el Mercado Central y las Torres de Serranos y Quart.

También se prohíbe la colocación de elementos que generen humo o residuos que puedan afectar a estos monumentos.

Los organizadores de eventos relacionados con las Fallas deberán asegurarse de que actividades como concursos de paellas, fuegos artificiales y otros actos se realicen a una distancia de al menos 3 metros de las esculturas y otros elementos de valor histórico-artístico.

Además, se aplicarán medidas de protección a todas las esculturas, monumentos o placas catalogadas que estén en la proximidad de estas actividades.

En cuanto a los espacios visuales de los monumentos mencionados, no se permitirán contenedores ni urinarios, y se incrementará la vigilancia policial en áreas donde ha habido un aumento de actos vandálicos, especialmente durante la semana de Fallas.

Por último, se ha previsto un servicio de seguridad privada en la vía pública para proteger el perímetro de la Lonja de Mercaderes, que es Patrimonio de la Humanidad.

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