El Pleno del Ayuntamiento aprueba la construcción del CEIP Santo Ángel de la Guarda en Valencia, con un aumento significativo en el presupuesto debido al alza de precios y nuevas instalaciones.
El pasado 29 de octubre de 2024, el Pleno del Ayuntamiento de Valencia dio luz verde a la modificación del presupuesto para la construcción del Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Santo Ángel de la Guarda, ubicado en el barrio de la Raiosa.
Esta iniciativa implica una fuerte inversión, que se ha incrementado en un 41% hasta alcanzar los 11,2 millones de euros (aproximadamente 11.225.442,27 euros). La razón principal tras este aumento se debe a la escalada en los costos de los materiales de construcción y a la ampliación de las instalaciones, que incluirán nuevas aulas para dar respuesta a las necesidades del alumnado.
Las obras, que se prevén comenzar en el segundo semestre de 2025, pondrán fin a un periodo de seis años en el que muchos estudiantes han tenido que recibir clases en barracones, una situación que ha sido objeto de críticas y solicitudes de mejora por parte de las familias afectadas.
El nuevo CEIP contará con un programa educativo que incluirá doce unidades de Educación Infantil y dieciocho unidades de Educación Primaria.
Además, ofrecerá servicios complementarios como un comedor con capacidad para 300 estudiantes en dos turnos, juegos de pelota valenciana, y otras actividades recreativas.
El Pleno también aprobó unánimemente la delegación de competencias para la rehabilitación del CEIP San José de Calasanz, otro de los proyectos bajo el Plan Edificant, un programa que busca revitalizar la infraestructura educativa en la comunidad.
Sin embargo, el debate en torno a estas iniciativas ha puesto en evidencia diferencias de opiniones entre el equipo de gobierno y la oposición.
La concejala de Servicios Centrales, Julia Climent, acusó a las administraciones anteriores de no haber logrado la ejecución de los proyectos que habían prometido, señalando que en 2023, la mayoría de las iniciativas estaban estancadas y apenas con los proyectos redactados.
Climent calificó el Plan Edificant como un “gran fiasco”, argumentando que únicamente se había completado un 25% de las propuestas dentro del plan.
En respuesta, algunos miembros de la oposición, como la concejala de Compromís Luisa Notario, defendieron que el gobierno actual se había encontrado con proyectos ya en marcha y que lo que se estaban realizando ahora son las competencias para llevar a cabo las nuevas actuaciones.
La concejala socialista Maite Ibáñez también aportó a la discusión al señalar que en el último recorte, se dejaron de invertir 122 millones de euros en educación, lo que significó la paralización de muchas obras esenciales en los centros educativos.
Este tipo de declaraciones subrayan la complejidad de la situación educativa en Valencia y la necesidad de una estrategia clara para abordar los problemas de infraestructura.
El terreno donde se construirá el nuevo CEIP Santo Ángel de la Guarda cuenta con una extensión de 12.000 m2, de los cuales se edificarán 6.600 m2. Esta ubicación es parte del proyecto de urbanización del parque central de Ingenieros, lo que añade un componente de desarrollo urbano al proyecto educativo.
Igualmente, la concejalía de Urbanismo, Juan Giner, destacó que con la aprobación de este proyecto se está respondiendo a una demanda urgente de las familias, que durante años han buscado mejorar las condiciones educativas de sus hijos.
"Con la coordinación entre el Ayuntamiento y la Generalitat, se están logrando avances significativos en infraestructuras educativas que habían quedado estancadas en gestiones anteriores", concluyó Giner.
Mientras tanto, la rehabilitación del CEIP San José de Calasanz también es de gran importancia, con un incremento de financiación de aproximadamente 2 millones de euros, alcanzando un total que supera los 5,2 millones de euros.
Estos esfuerzos reflejan un compromiso renovado con la educación pública y la mejora de las instalaciones para el bienestar de los estudiantes en Valencia.