La alcaldesa de Valencia, Maria José Catalá, visita los restos del antiguo monumento a Sorolla y anuncia la posibilidad de su recuperación en la playa del Cabanyal.

El 24 de julio de 2024, la ciudad de Valencia dio un paso significativo hacia la recuperación de una parte importante de su patrimonio cultural.

La alcaldesa, Maria José Catalá, realizó una visita a la parcela de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) en San Isidro, donde se han encontrado restos valiosos del antiguo monumento a Joaquín Sorolla, así como de la Tortada de Goerlich.

Hasta el momento, se ha logrado recuperar una gran cantidad de las piezas originales que permitirán la posible reconstrucción del monumento a Sorolla en su ubicación original, la playa del Cabanyal, tal como lo había deseado el célebre pintor valenciano.

El monumento a Sorolla, que estuvo en pie desde 1933 hasta su destrucción en 1957, junto con la Tortada de Goerlich, representaron durante años un símbolo monumental de la ciudad.

Ambas estructuras, levantadas el mismo año, se convirtieron en postales típicas de Valencia durante tres décadas.

Según la alcaldesa, esta es una de las iniciativas culturales más importantes en las que se encuentran trabajando, destacando la importancia de devolver el monumento a su contexto original, un lugar que verdaderamente inspiró las magníficas obras del artista.

Durante su visita, la alcaldesa estuvo acompañada por el concejal de Cultura, José Luís Moreno, el arquitecto Javier Hidalgo, encargado del inventario y catalogación de las piezas, y personal del Servicio de Investigación de Arqueología Municipal (SIAM). Catalá enfatizó que este proyecto es el resultado de un proceso meticuloso y respetuoso con el legado de Sorolla, afirmando que es un paso para reparar una deuda histórica con la cultura valenciana.

Por otro lado, el estudio realizado indica que es viable la reconstrucción parcial del pórtico circular de la Tortada de Goerlich, otro de los íconos arquitectónicos que adornaban la plaza del Ayuntamiento de Valencia.

Gracias a una documentación detallada y el estado de conservación de las piezas recuperadas, se facilitará la restauración de este notable elemento arquitectónico.

El monumento a Sorolla se encontraba dominado por un busto de bronce del pintor, realizado en 1916 por Mariano Benlliure, que estaba situado sobre una tribuna con vista al mar.

Sorolla, en vida, manifestaba su deseo de que su obra se ubicara en la playa, donde encontró inspiración para muchas de sus obras más famosas.

La construcción del monumento fue encargada al arquitecto Francisco Mora en 1925, y se inauguró el 31 de diciembre de 1933, en un lugar que hasta entonces había albergado otros edificios históricos.

La intervención para la recuperación del monumento representa un esfuerzo renovado por preservar la historia de Valencia y resaltar el legado de artistas que han marcado su cultura y desarrollo.

A finales de 2023, se encargaron estudios preliminares que han permitido la verificación de los materiales y la autenticidad de las piezas recuperadas, lo que pone en marcha el proceso de anastilosis, una técnica de reconstrucción que se basa en la unión de fragmentos originales para revivir antiguos monumentos.

Con la finalización de los trabajos de inventario y catalogación, y tras las consultas necesarias con los organismos públicos implicados, se redactará el proyecto básico de reconstrucción, marcando así el inicio de una nueva etapa en la historia de este emblemático monumento valenciano.