AUMSA destinará el 65 % de su presupuesto en 2024 para la construcción de 213 viviendas públicas de alquiler asequible en Valencia capital.

El Consell d'Administració de AUMSA ha aprobado en su reunión de hoy un presupuesto para el año 2024 de 26,5 M€. De esta cantidad, el 65 % se destinará a la construcción de 213 viviendas públicas de alquiler asequible, objetivo que se enmarca dentro de las prioridades que el equipo municipal se ha marcado en esta legislatura.

En este sentido, el concejal de Urbanismo, Juan Giner, ha destacado que "en los últimos años, los proyectos para la construcción de nuevas viviendas estaban estancados y hemos decidido duplicar los esfuerzos para que se diseñen nuevas actuaciones o se impulsen aquellas que estaban ralentizadas.

Queremos que AUMSA cambie su ritmo de trabajo y haga realidad los nuevos proyectos que ponemos sobre la mesa".

Dentro de las actuaciones programadas destaca la construcción de 68 viviendas en el edificio Hortolanes 1, así como las 75 viviendas que se levantarán en el edificio de la Avenida de los Naranjos, 9. Todas estas actuaciones de vivienda pública se destinarán a alquileres asequibles y supondrán una inversión de 17,2 M€ en 2024. "Debemos responder a las necesidades de las familias y la búsqueda de una vivienda es una de las principales demandas actuales.

Y la vía del alquiler asequible es sin duda un camino que debemos seguir para que el acceso a una vivienda sea real", ha destacado Giner.

Por otro lado, durante la reunión del Consell d'Administració, también se ha aprobado el impulso de la redacción del Plan Especial 'Ciutat Fallera' y el Plan Especial 'Castellar-l’Oliveral'. En este sentido, se destinarán 195.000 € para aprobar el expediente de contratación para la prestación de servicios que llevará a la elaboración de la documentación necesaria para culminar la fase ambiental y realizar la fase urbanística de los dos planes.

Finalmente, el Consell d'Administració ha encargado a la nueva gerencia una auditoría de gestión con el propósito de conocer la situación real de la empresa y poder diseñar unas políticas de vivienda realistas y claras que nos alejen de los errores cometidos en los últimos años.