El CEO de SpaceX sugiere que la Estación Espacial Internacional podría abandonar su órbita en los próximos dos años, mucho antes de la fecha oficial de 2031, debido a preocupaciones sobre su seguridad y envejecimiento.
La ISS, un proyecto conjunto de NASA, la Agencia Espacial Canadiense, la Agencia Espacial Europea, la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón y Roscosmos, ha estado en funcionamiento desde 1998 y ha sido un pilar en la investigación espacial durante más de dos décadas.
Desde su inicio, la estación ha soportado varias misiones tripuladas, permitiendo avances científicos en áreas que van desde la biomedicina hasta la física fundamental, con el objetivo de preparar futuras misiones de exploración más profundas en el espacio, como las destinadas a Marte.
Sin embargo, a medida que pasan los años, la estructura de la #ISS muestra signos de envejecimiento y deterioro, lo que ha generado preocupaciones sobre su seguridad a largo plazo.
En una publicación en la plataforma X, Musk expresó su inquietud respecto a la integridad estructural de la estación: “Existen preocupaciones serias sobre la seguridad a largo plazo de la Estación Espacial.
Algunas partes están simplemente demasiado viejas y ese riesgo aumenta con el tiempo”. El CEO de #SpaceX no es el único que ha levantado la voz en contra del estado actual de la ISS. Expertos como Casey Handmer, exarquitecto de sistemas en NASA JPL, han advertido sobre la fragilidad estructural de la estación.
Handmer advirtió que “la integridad estructural de la ISS es mucho más precaria de lo que se comunica públicamente. Se han detectado múltiples grietas y no existe un margen de seguridad en estos fallos. La estación no está diseñada para resistir fallos catastróficos sin consecuencias graves”. Además, afirmó que “podríamos despertar mañana y encontrar que la estación ha fallado de manera catastrófica, en un instante, sin previo aviso”.
Este riesgo de colapso ha llevado a que algunos expertos consideren que la desactivación anticipada podría ser una opción más segura.
La NASA anunció la adjudicación de un contrato por valor de aproximadamente 730 millones de euros (843 millones de dólares) a SpaceX para desarrollar un Vehículo de Deorbitación de EE
Mientras tanto, en junio de 2024, la NASA anunció la adjudicación de un contrato por valor de aproximadamente 730 millones de euros (843 millones de dólares) a SpaceX para desarrollar un Vehículo de Deorbitación de EE.
UU. (USDV), basado en la nave Dragon. Este vehículo será encargado de acoplarse a la ISS y guiarla hacia una desorbitación controlada sobre el Océano Pacífico Sur, con el fin de reducir al mínimo los riesgos para la estación y su tripulación.
Por otro lado, #Elon Musk ha sido un firme defensor de los viajes a Marte como próximo objetivo para la humanidad. En un mensaje publicado en febrero, Musk afirmó que la ISS “ha cumplido su propósito” y que su utilidad incremental es muy limitada, reiterando su visión de que “debemos ir a Marte”.
La propuesta de desactivar la ISS antes de lo previsto genera debates sobre la seguridad, la inversión y el futuro de la exploración espacial.
Desde su lanzamiento en 1998, la ISS ha sido un símbolo de cooperación internacional en la exploración espacial. Sin embargo, con los avances tecnológicos y la entrada en una nueva era de la exploración, algunos expertos consideran que es momento de planificar una transición hacia futuras estaciones o bases en la Luna y Marte.
