Suni Williams, comandante de la Estación Espacial Internacional, lleva a cabo su octava caminata espacial junto a Nick Hague, mientras se preparan para su regreso a la Tierra en unos meses.
El jueves, Suni Williams, la comandante de la Estación Espacial Internacional (EEI), llevó a cabo su primera caminata espacial en más de siete meses, marcando un momento significativo para ella y para la NASA.
Junto a su colega Nick Hague, Williams salió al exterior de la EEI para realizar trabajos de reparación que ya se habían retrasado. La caminata ocurrió mientras la estación orbital se encontraba a 420 kilómetros sobre Turkmenistán.
Williams, en su octava caminata espacial, realizó tareas de mantenimiento cruciales, incluyendo el reemplazo de un reflector plano en el exterior de la estación.
Este trabajo presentaba sus desafíos, pero la astronauta logró completar su misión sin causar daños al vehículo de SpaceX que se encuentra en espera para su regreso a casa, previsto para esta primavera.
La caminata espacial, que comenzó a las 14:00 horas CET, se extendió por aproximadamente 6.5 horas. Este evento también marcó el regreso de las caminatas espaciales de los astronautas de la NASA, que habían sido suspendidas desde una misión abortada el verano pasado debido a un problema de fuga de agua en la esclusa de aire.
La situación ha sido resuelta según informes de la NASA.
Esta misión es especialmente notable ya que Williams y Hague originalmente habían lanzado en junio de 2024 a bordo de la cápsula Starliner de Boeing, con la expectativa de regresar después de una semana.
Sin embargo, problemas técnicos con la cápsula han extendido su permanencia en órbita, y su regreso a la Tierra no se espera hasta finales de marzo o principios de abril, lo que significaría un total de diez meses desde su lanzamiento.
Durante la caminata, Williams tuvo la oportunidad de observar de cerca la cápsula de SpaceX que finalmente los devolverá a casa. Este vehículo espacial ha sido diseñado específicamente para facilitar el transporte de astronautas y suministros a la EEI, y su diseño ha sido objeto de comentarios positivos en la comunidad de la ingeniería espacial.
Además, los astronautas trabajan en reparaciones relacionadas con el telescopio NICER de la estación, que está dedicado a estudiar los pulsos de rayos X emitidos por estrellas de neutrones.
Williams y Hague están colocando parches en forma de cuña en el telescopio para minimizar la luz solar que podría interferir con las medidas de rayos X.
Este trabajo está enmarcado dentro de un contexto histórico donde las caminatas espaciales han jugado un papel crucial en la evolución de la investigación espacial.
Desde la primera caminata espacial realizada por Alexei Leonov en 1965, hasta las misiones más recientes, cada salida al espacio ha contribuido no solo al mantenimiento de la EEI, sino también al desarrollo de tecnologías vitales para futuras misiones más allá de la órbita terrestre.
A medida que Williams y Hague continúan su trabajo en el espacio, la comunidad científica observa con interés las futuras oportunidades de investigación que se desarrollarán a partir de estos esfuerzos.
La expectativa de su regreso a la Tierra después de una prolongada misión es un recordatorio de los desafíos y triunfos que enfrentan los astronautas en el vasto espacio.