Dos antiguas esferas de piedra, símbolos culturales y espirituales para la comunidad indígena Kettle y Stony Point en Ontario, fueron devueltas a su lugar de origen después de haber sido poseídas por una universidad. La ceremonia de restitución resalta la importancia del respeto por los objetos sagrados y el reconocimiento de las culturas tradicionales.

Imagen relacionada de retiran en canada las antiguas huevos sagrados de la comunidad kettle y stony point

Estas reliquias, de gran valor espiritual y simbólico para la nación Anishinaabek, habían sido retiradas del territorio en el pasado y ahora regresaron en una ceremonia cargada de significado.

Las piedras, que en su conjunto representan un importante legado cultural, son llamadas 'kettles' por su forma similar a una vasija. Se encuentran en la región desde hace varios siglos y poseen un valor sagrado que trasciende su mera existencia física. La comunidad cree que estas 'huevos' son símbolos de poder y protección, relacionados con la figura mítica del Thunderbird, un espíritu ancestral que según las leyendas locales, visita los cielos durante tormentas para advertir a las personas.

La pérdida y recuperación de estos objetos representa también la recuperación de la soberanía cultural y espiritual de los pueblos originarios.

La restitución fue posible gracias a la colaboración entre la comunidad y Western University en Londres, Ontario. Christy Brissette, vicepresidenta de iniciativas #indígenas en la universidad y miembro de la comunidad Kettle y Stony Point, afirmó que devolver estas reliquias sagradas es un paso crucial en el proceso de reconciliación.

"Traer de regreso estos objetos sagrados, considerados huevos del Thunderbird, revitaliza nuestra #cultura y fortalece los lazos con nuestras tradiciones ancestrales," comentó Brissette.

Durante la ceremonia, se realizó un ritual conocido como 'ceremonia del tubo', un acto tradicional que incluye oración y canciones sagradas, en presencia de miembros de la comunidad, ancianos y representantes de la universidad.

Bernard George, uno de los participantes, resaltó la importancia del evento, señalando que el Thunderbird, símbolo de protección, aparece en los emblemas y relatos de la cultura Anishinaabek y que su espíritu emerge cuando los huevos se rompen, liberando energías positivas y protección.

Los objetos devueltos incluyen tres de las más grandes y pequeñas esferas, junto con varios fragmentos, todos recuperados de la Universidad Western, donde habían sido donados en los años 90 por un propietario de cantera que los usaba en un jardín de rocas para docencia.

Sin embargo, uno de los 'huevos' descubiertos en las excavaciones de la biblioteca Weldon permanece en posesión de la institución.

Estas piedras son formadas hace aproximadamente 370 millones de años, en la era conocida como Paleozoico, en la época de los 'Edad de los Peces'. Debido a su composición de calcita, sufren fracturas cuando se secan y se almacenan fuera del agua, puesto que el agua de lluvia, ligeramente ácida, puede infiltrarse y disolver los minerales.

La importancia cultural y científica de estos artefactos ha impulsado esfuerzos por protegerlos y respetar su contexto original

La importancia cultural y científica de estos artefactos ha impulsado esfuerzos por protegerlos y respetar su contexto original.

El proceso de devolución también representa un cambio en la percepción académica. Desmond Moser, decano adjunto en la Facultad de Ciencias de Western University, explicó que en el pasado, los geólogos no valoraban ni comprendían adecuadamente la relación de los pueblos indígenas con la tierra y los objetos naturales.

La ceremonia sirvió para educar y promover una mayor sensibilidad cultural y respeto por las creencias ancestrales.

Para la comunidad, estos objetos son mucho más que simples piedras; representan su historia, espiritualidad y la conexión con la naturaleza. La recuperación de los 'huevos' del Thunderbird no solo fortalece la identidad cultural, sino que también impulsa un diálogo de respeto y entendimiento entre las comunidades indígenas y las instituciones académicas."Es un primer paso en un largo camino hacia la justicia cultural y la recuperación de nuestro patrimonio", afirmó Jordan George, encargado de la revitalización lingüística y comunicaciones de Kettle y Stony Point.