DeepSeek, una startup china, lanza un modelo de inteligencia artificial que podría transformar el mercado y desplazar a competidores estadounidenses como Nvidia.
En el mundo de la inteligencia artificial, un nuevo protagonista ha emergido con fuerza: DeepSeek, una startup china que está revolucionando el mercado y desafiando el predominio de las empresas estadounidenses en este sector.
Este modelo de IA, que se lanzó recientemente, ofrece una alternativa viable y más económica a modelos como ChatGPT, sacudiendo las bases de la valoración de las acciones de gigantes tecnológicos como Nvidia.
Desde su lanzamiento, DeepSeek ha capturado la atención del público, convirtiéndose en la aplicación gratuita más descargada en la App Store de EE.
UU., logrando desplazar a competidores establecidos. Aunque DeepSeek afirma haber desarrollado su asistente virtual para un costo de menos de 5.400.000 euros y utilizando menos datos que otros competidores, esto ha llevado a cuestionamientos sobre la sostenibilidad del gasto que realizan las grandes empresas estadounidenses en estos avances tecnológicos.
Los efectos del lanzamiento de DeepSeek fueron inmediatos. Las acciones de Nvidia, líder en la fabricación de chipsets para aplicaciones de inteligencia artificial, cayeron un 17% en un solo día. Esta situación provocó un terremoto en el mercado de valores, donde el Nasdaq experimentó su mayor caída porcentual desde finales de diciembre pasado.
Algo que no pasó desapercibido para los analistas del sector.
Sheldon Fernandez, cofundador de DarwinAI, expresó que la capacidad de DeepSeek de igualar o incluso superar ciertas funcionalidades de los modelos líderes en Silicon Valley, a un costo significativamente menor, es algo que ha sorprendido a muchos en la industria.
Esto plantea serias interrogantes sobre el modelo de negocio de las compañías que han estado monopolizando el acceso a la tecnología de inteligencia artificial, que a menudo se ofrece a un alto precio.
El desarrollo de DeepSeek, que se originó en 2023 a partir de un fondo de cobertura, ha sido notablemente rápido. Aparte de su modelo de IA, DeepSeek ha lanzado una versión de código abierto que permite a desarrolladores e investigadores examinar su funcionamiento y adaptarla a sus propias necesidades.
Este enfoque contrasta con las políticas de muchas empresas que exigen suscripciones mensuales, lo que podría poner en jaque sus modelos de ingreso.
DeepSeek no solo desafía la dominación estadounidense desde el punto de vista financiero, sino que su tecnología también pone a prueba las recientes restricciones impuestas por EE.
UU. en la exportación de chips de computación hacia China, que estaban diseñadas para frenar sus avances en IA. Sin embargo, DeepSeek ha logrado sortear estas restricciones utilizando chips que no son de alta gama, pero que aún así han mostrado resultados impresionantes.
Marc Andreessen, un destacado capitalista de riesgo en Silicon Valley, incluso comparó el impacto de DeepSeek con el lanzamiento del Sputnik en la década de 1950, un momento que marcó el inicio de la carrera espacial entre EE.
UU. y la Unión Soviética. Esto subraya la importancia de DeepSeek no sólo como un nuevo actor en el panorama tecnológico, sino como una advertencia clara para las industrias que han disfrutado de una monopolio casi sin competencia.
Los acontecimientos recientes en el ámbito de la inteligencia artificial sugieren que puede haber un cambio de poder en el sector, y empresas como Microsoft, que han invertido miles de millones de dólares en IA, tendrán que reconsiderar sus estrategias.
La capacidad de DeepSeek para innovar a un costo significativamente menor podría obligar a sus competidores a adaptarse o enfrentar una pérdida de relevancia en el mercado.
En conclusión, el fenómeno DeepSeek no es solo una historia de éxito empresarial, sino un símbolo de una transformación inminente en la industria de la inteligencia artificial.
Esta situación también genera reflexiones sobre los desafíos y oportunidades que enfrenta el sector tecnológico globalmente, mientras observa cómo un actor estadounidense China toma un papel cada vez más relevante en la carrera por dominar la inteligencia artificial.
