Un nuevo estudio advierte que la tala indiscriminada de árboles en Ontario y Quebec ha dejado a los bosques de estas provincias gravemente agotados y ha puesto en peligro a los majestuosos caribúes del bosque.
Un estudio reciente ha revelado que la tala de árboles en Ontario y Quebec ha tenido un impacto devastador en los bosques de estas provincias, poniendo en peligro a los caribúes del bosque boreal.
La investigación, publicada en la revista académica Land, ha encontrado que la tala indiscriminada llevada a cabo entre 1976 y 2020 ha resultado en la pérdida de más de 14 millones de hectáreas de bosque, un área aproximadamente dos veces el tamaño de Nueva Brunswick.
Actualmente, solo quedan 21 millones de hectáreas de bosque antiguo en la región, definido como bosques de al menos 100 años de edad.
La situación es especialmente preocupante, ya que se ha descubierto que solo el 42% del área forestal corresponde a bosques antiguos, y la mayoría de estos se encuentran en áreas remotas del norte.
Además, el estudio reveló que la mayoría de los bosques antiguos que quedan se encuentran fragmentados y amenazados por la tala, lo que pone en peligro la supervivencia de los caribúes del bosque boreal.
Solo se han identificado ocho áreas de bosque antiguo de más de 500 kilómetros cuadrados que siguen intactas en Ontario y Quebec.
Estos parches de bosque restantes son esenciales para la supervivencia de los caribúes, ya que requieren áreas extensas de hábitat sin interrupciones.
El estudio encontró que 19 de las 21 manadas de caribúes restantes en Ontario y Quebec se consideran de 'alto riesgo' o 'muy alto riesgo' debido a las alteraciones en su hábitat.
El epicentro de los tornados en Canadá se desplaza de las Praderas a Ontario-Quebec, según los investigadores
Se advierte que los tornados que devastaron las áreas suburbanas de Ottawa y Montreal resaltan una preocupación creciente para los investigadores. Los datos preliminares indican que la zona más densamente poblada de Canadá, en Ontario y Quebec, podría convertirse en el epicentro de los tornados, con consecuencias cada vez más devastadoras.La desaparición de los bosques antiguos y la creación de una extensa red de caminos de tala ha tenido un impacto significativo en la población de caribúes.
Estos animales se alimentan de líquenes, que crecen en el suelo de los bosques más antiguos.
El estudio también señala que los bosques plantados después de la tala son menos diversos en especies y no ofrecen las condiciones adecuadas para los caribúes, como un suelo rico en líquenes.
Los expertos advierten que, si no se toman medidas urgentes para proteger y restaurar el hábitat de los caribúes, esta especie podría enfrentar la extinción en un futuro cercano.
En respuesta a este estudio, grupos ambientalistas han solicitado medidas más estrictas para proteger a los caribúes y su hábitat.
Rachel Plotkin, gerente de proyecto boreal de la Fundación David Suzuki, afirmó que las prácticas actuales de tala no son sostenibles.
Se necesitan esfuerzos para proteger y restaurar el hábitat de los caribúes para garantizar su supervivencia.
Aunque el gobierno federal de Canadá ha expresado su compromiso con la protección de especies en peligro, activistas y expertos sostienen que se requiere una acción más contundente y coordinada entre las provincias y territorios para abordar esta crisis.