La Primera Nación Spuzzum está furiosa después de que el gobierno federal decidiera no emitir una orden de emergencia para proteger al búho manchado del norte, especie en peligro de extinción.
La Primera Nación Spuzzum de Columbia Británica está furiosa tras la decisión del gobierno federal de revertir la emisión de una orden de emergencia para el búho manchado del norte en el suroeste de Columbia Británica.
El jefe James Hobart dijo que los miembros de su comunidad están "furiosos" después de que la decisión se detallara en una carta emitida esta semana por el Servicio de Vida Silvestre de Canadá, una rama del Departamento de Medio Ambiente.
La carta decía que el gobierno no emitiría una orden de emergencia para evitar la tala en dos cuencas hidrográficas dentro del territorio de Spuzzum en Fraser Canyon, a unos 130 kilómetros al noreste de Vancouver.
La tala era una actividad que el ministro de Medio Ambiente, Steven Guilbeault, había dicho que representaba "una amenaza inminente" para la supervivencia del búho manchado del norte.
La Primera Nación Spuzzum está furiosa tras la decisión del gobierno de revertir la orden de protección de los búhos en peligro de extinción.
El jefe James Hobart dijo que los miembros de su comunidad están indignados después de que la decisión se detallara en una carta emitida esta semana por el Servicio de Vida Silvestre de Canadá, una rama del Departamento de Medio Ambiente.
La carta decía que el gobierno no emitiría una orden de emergencia para evitar la tala en dos cuencas hidrográficas dentro del territorio de Spuzzum en Fraser Canyon, a unos 130 kilómetros al noreste de Vancouver.
La tala era una actividad que el ministro de Medio Ambiente, Steven Guilbeault, había dicho que representaba "una amenaza inminente" para la supervivencia del búho manchado del norte.
El ministro Guilbeault dijo a principios de este año, en otra carta del Servicio de Vida Silvestre de Canadá, que recomendaba la orden de emergencia al gabinete para proteger a la especie.
Hobart dijo que Guilbeault visitó Spuzzum en febrero y vio de primera mano la situación de los búhos manchados y su hábitat de bosques antiguos.
Pero dijo que no ha habido ninguna comunicación con la nación desde entonces, aparte de la segunda carta que decía que el gabinete, en cambio, estaba respaldando "un enfoque de colaboración" con el gobierno provincial y las comunidades indígenas después de considerar factores como los impactos socioeconómicos y legales.