El programa piloto de reparto eléctrico en Santander ha demostrado ser un éxito, reduciendo emisiones y promoviendo un comercio más ecológico.

El reciente programa piloto de reparto eléctrico impulsado por el Ayuntamiento de Santander, en colaboración con la Asociación Cántabra de Empresarios Floristas, ha sido calificado como un éxito rotundo por el concejal de Comercio, Álvaro Lavín.
Este proyecto, que se enmarca dentro del Plan Estratégico del Comercio de Santander 2022-2026, tiene como objetivo principal facilitar la transición hacia un modelo comercial más sostenible en la ciudad.
Desde su lanzamiento en septiembre hasta su culminación en diciembre, el programa ha logrado evitar la emisión de aproximadamente 1,2 toneladas de CO2, un hito significativo en la lucha contra el cambio climático.
Durante este periodo, se efectuaron 828 entregas, lo que se traduce en un promedio de 10 repartos diarios. Los días de mayor actividad se registraron el 3 de octubre, con 22 entregas, y el 8 de noviembre, cuando se alcanzaron 23 repartos.
El impacto ambiental positivo de este programa no solo se refleja en la reducción de emisiones, sino también en el ahorro de combustible, que asciende a 560 euros durante los meses de operación.
Además, se recorrieron 10.667 kilómetros utilizando vehículos eléctricos, lo que representa una alternativa ecológica y eficiente en comparación con el uso de vehículos de gasolina o diésel.
Álvaro Lavín destacó que la implementación de este sistema no solo ayuda a reducir la contaminación del aire y la cantidad de vehículos en las calles de Santander, sino que también presenta una solución viable para el sector comercial.
"Esta actuación es totalmente rentable, ya que no solo hemos ahorrado recursos, sino que también hemos concienciado a la ciudadanía sobre la importancia de trabajar por la sostenibilidad en el comercio", afirmó el edil.
Este programa se convierte en un ejemplo a seguir, no solo para los floristas, sino para todos los sectores comerciales de la ciudad. "Esperamos que esta experiencia sirva de inspiración para que otros comercios de Santander también adopten prácticas sostenibles", añadió Lavín.
El proyecto forma parte del programa 'Comercio de Santander. Camino de la excelencia', que cuenta con el respaldo de los Fondos Europeos Next Generation, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Esta iniciativa se suma a otros esfuerzos históricos en la ciudad que buscan promover un desarrollo urbano más responsable y amigable con el medio ambiente.
La historia de la floristería en Santander es rica y variada, con un legado que ha ido evolucionando a lo largo de los años. La adaptación a nuevas tecnologías y prácticas sostenibles es crucial para mantener su relevancia en un mundo que cada vez exige más conciencia ambiental.
Con este proyecto, Santander no solo se pone a la vanguardia del comercio sostenible en España, sino que también establece un precedente para otras ciudades que buscan un futuro más verde.