El barrio de Nueva Montaña estrena un innovador parque público que combina espacios naturales, zonas de ocio y áreas para perros, fortaleciendo el compromiso del Ayuntamiento con un desarrollo urbano sostenible y accesible.

El proyecto, que ha sido visitado por los concejales de Medio Ambiente y Fomento, Margarita Rojo y Agustín Navarro, refleja la visión de una ciudad moderna que apuesta por la integración de la naturaleza en su planificación urbana.
En sus palabras, se trata de un impulso para crear entornos que no solo mejoren la estética de la ciudad, sino que también fomenten hábitos saludables y la cohesión social.
El parque se divide en dos grandes áreas: una al norte y otra al sur del puente sobre las vías del ferrocarril. La sección norte, de 3.200 metros cuadrados, está diseñada como un espacio natural con senderos y zonas de descanso, todos ellos adaptados para garantizar la accesibilidad universal.
Está rodeada de zonas verdes con especies autóctonas, que aportan biodiversidad y ofrecen un respiro ecológico en medio de la ciudad. La entrada principal se realiza desde el puente y una glorieta cercana al antiguo campo de fútbol, facilitando el acceso a todos los vecinos.
Por otro lado, la zona sur, de 1.300 metros cuadrados, se concentra en áreas de #ocio y deporte, destacando la instalación de un circuito de ‘pumptrack’, un espacio moderno y seguro para la práctica de deportes sobre ruedas.
Este circuito, diseñado por una empresa autorizada por la Real Federación Española de Ciclismo, fomenta la actividad física y hábitos saludables en jóvenes y adultos, promoviendo un estilo de vida activo.
Este espacio de ocio surgió gracias a un convenio con la cadena de supermercados Aldi
Este espacio de ocio surgió gracias a un convenio con la cadena de supermercados Aldi, gestionado por Promociones y Gestiones Inmobiliarias Ratisbona S.L. La cesión de estos terrenos forma parte de un plan de desarrollo urbanístico aprobado en el PGOU de 1997, que busca potenciar zonas de reparto y mejorar la #infraestructura urbana.
El parque cuenta además con un cerramiento metálico de dos metros de altura en su límite con las vías del ferrocarril, diseñado para proteger a los usuarios sin perder la estética, ya que será decorado con una línea de laureles que en unos años ocultarán la valla, integrándola en el entorno natural.
Desde hace más de un mes, también se dispone de un área canina de 1.980 metros cuadrados, equipada con una valla de madera de 200 metros y diversos elementos de juego, incluyendo una fuente especial para perros y sus dueños.
Este conjunto de infraestructuras no solo aporta beneficios estéticos y recreativos, sino que también tiene un impacto positivo en la economía local.
La apertura del supermercado Aldi en el mismo barrio ha contribuido a la creación de empleo, además de ofrecer nuevos servicios y espacios de ocio. Los responsables municipales han destacado que estos avances fortalecen el tejido social y económico, generando un entorno más próspero, accesible y respetuoso con el medio ambiente.
En un contexto histórico, los parques urbanos en España han sido considerados esenciales desde principios del siglo XX, cuando las ciudades comenzaron a adoptar políticas de planificación que priorizaban la incorporación de #espacios verdes para mejorar la salud y el bienestar de los ciudadanos.