La ciudad de Santander participa en la Hora del Planeta, un evento global que busca concienciar sobre el cambio climático.

Este sábado, Santander se sumará una vez más a la iniciativa internacional conocida como ‘Hora del Planeta’, en la que se busca concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de colaborar en la lucha contra el cambio climático.

Entre las 20:30 y las 21:30 horas, el Ayuntamiento apagará las luces de siete edificios y espacios públicos emblemáticos, incluyendo la Catedral, el Palacio de la Magdalena, y la plaza Porticada, como símbolo de su compromiso con el medio ambiente.

Margarita Rojo, concejala de Medio Ambiente, ha destacado la importancia de esta acción, que no solo se limita a la inversión de una hora sin luz, sino que invita a toda la comunidad a reflexionar sobre su papel en la protección del planeta.

La Hora del Planeta, que se celebra el 22 de marzo, es un evento que comenzó en 2007 en Sidney, Australia, y que ha crecido exponencialmente, convirtiéndose en uno de los movimientos ambientales más significativos del mundo.

En España, esta campaña se lanzó en 2009 y ha logrado congregar a millones de personas, empresas e instituciones en más de 200 países.

Durante esta hora, Santander no solo apagará las luces de sus edificios más representativos, sino que también invita a sus ciudadanos a participar desde sus hogares, apagando las luces y reflexionando sobre prácticas sostenibles que pueden incorporar en su vida diaria.

Este gesto, aunque simple, busca generar un impacto colectivo y recordar la importancia de cuidar nuestro entorno. El lema de este año, ‘Apaga la luz. Defiende el Planeta’, resuena con fuerza, instando a cada individuo a hacerse responsable por la salud del planeta.

El cambio climático es una realidad que nos afecta a todos, y la necesidad de actuar nunca ha sido tan urgente. Con fenómenos meteorológicos extremos, el aumento del nivel del mar y la pérdida de biodiversidad, la acción colectiva es esencial. El compromiso de Santander con el desarrollo sostenible se refleja no solo en este tipo de iniciativas, sino también en políticas de ahorro energético y en diversas acciones orientadas a mitigar el calentamiento global.

Desde su inicio, la Hora del Planeta ha sido un recordatorio de que cada pequeño esfuerzo cuenta. La luz que se apaga durante una hora simboliza la unión de millones de voces que claman por un cambio, y Santander se erige como parte de este coro global.

La concejala ha expresado su esperanza de que este evento inspire a la población a pensar en soluciones más sostenibles para su día a día, desde el uso responsable de la energía hasta la reducción de residuos.

En conclusión, la Hora del Planeta es más que un evento; es una oportunidad para que cada uno de nosotros tome acción. Desde el 2007, este movimiento ha crecido, mostrando que cuando las comunidades se unen, pueden hacer una diferencia significativa. Santander, una ciudad que se preocupa por su entorno, reafirma su compromiso con el planeta y la salud de sus ciudadanos al participar en esta importante iniciativa.