La fábrica cordobesa celebra su séptimo aniversario de producción, consolidándose como un pilar de la industria automovilística argentina.

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Hoy, la planta cordobesa Santa Isabel conmemora su septuagésimo aniversario, celebrando 70 años de actividad ininterrumpida en la producción de vehículos en Argentina.

A lo largo de estas décadas, la planta ha sido el hogar de más de 3,5 millones de vehículos de 34 modelos diferentes, consolidándose como uno de los emblemas de la industria automotriz nacional.

La planta de Santa Isabel, situada a las afueras de Córdoba, es la segunda más antigua en funcionamiento en el país, sólo superada por la planta de Mercedes-Benz en Virrey del Pino, Buenos Aires, que fue inaugurada en 1951.

Aunque Mercedes-Benz ha traspasado recientemente sus operaciones en Argentina, Santa Isabel continúa siendo un bastión de producción.

Desde que se puso la primera piedra el 12 de marzo de 1955, este complejo industrial ha evolucionado significativamente. Se necesitó una impresionante cantidad de materiales para su construcción: 4,9 millones de kilos de acero, 2 millones de ladrillos y 9,8 millones de kilos de cemento.

La logística para trasladar el equipamiento desde los Estados Unidos implicó realizar 600 viajes en camiones, un testimonio del esfuerzo invertido en hacer de Santa Isabel un éxito.

A lo largo de su historia, los modelos emblemáticos que han salido de esta planta han dejado huella en la cultura argentina. Algunos de los vehículos más icónicos incluyen la IKA Estanciera, un auto que sigue presente en las zonas rurales, y el Torino, que se convirtió en leyenda tras competir en las 84 Horas de Nürburgring en 1969 con un equipo liderado por la figura destacada de Oreste Berta y bajo la dirección deportiva de Juan Manuel Fangio.

También se recuerda a Santa Isabel como el lugar donde se fabricó el 'Papa Móvil', utilizado por el Papa Juan Pablo II en su visita a Argentina en 1987, adaptado a partir de un modelo Renault Trafic.

Durante los años 90, la planta vivió un breve paréntesis bajo la administración de la Compañía Interamericana de Automóviles (CIADEA S.A.), antes de que Renault reanudara la producción. La introducción del modelo Clio en 1995 marcó el inicio de una etapa de modernización y adaptación a las exigencias del mercado. En la actualidad, la planta emplea a alrededor de 2,200 trabajadores y produce más de 70,000 unidades anualmente, lo que equivale a más de 400 vehículos al día, abarcando modelos de Renault como el Sandero, Stepway, Logan y Alaskan, además de la pick-up Nissan Frontier.

En los últimos años, ha habido una notable incorporación de tecnología con la llegada de sistemas de automatización y robótica, así como la implementación de la “industria 4.0”, buscando colocar a Santa Isabel en la vanguardia mundial de producción automotriz. Se proyecta además el lanzamiento de una nueva pick-up de media tonelada en 2026.

La inclusión de mujeres en el entorno laboral también es un aspecto notable, ya que desde 2017 han comenzado a ocupar diversos puestos en la planta, representando actualmente el 21% de la plantilla.

Este 70 aniversario no solo se trata de celebrar los hitos industriales, sino también de rendir homenaje a todos quienes han formado parte de esta historia y han hecho de Santa Isabel un símbolo de progreso y evolución dentro de la industria automotriz argentina.