La Comunidad de Madrid ha anunciado que contará con una cantidad significativa de 75.000 dosis de vacunas intranasales atenuadas contra la gripe para niños de entre 2 y 4 años.

Esta decisión se tomó la semana pasada, cuando el Consejo de Gobierno autorizó la celebración del contrato necesario para su compra.

Estas vacunas intranasales, que contienen virus atenuados, tienen la capacidad de simular una infección natural, lo que permite generar una respuesta inmunitaria que incluye la inmunidad de las mucosas.

Entre los beneficios de esta modalidad de vacunación se encuentra su facilidad de administración, ya que no requiere una inyección, lo que facilita su aceptación por parte de los niños.

Además, los posibles efectos secundarios son mínimos, limitándose a síntomas como congestión nasal y fiebre leve.

También se ha demostrado que este tipo de vacuna ayuda a mitigar la transmisión del virus a otros miembros de la familia, haciendo del entorno infantil un lugar más seguro.

La utilización de estas vacunas intranasales no es algo nuevo en la Comunidad de Madrid, ya que fueron empleadas por primera vez en 2023, en coincidencia con el inicio del curso escolar.

Durante esa campaña, se logró vacunar a más de 85.000 niños, un avance significativo en la protección de la población infantil frente a esta enfermedad estacional.

Con la nueva adquisición de dosis, el gobierno autonómico tiene la expectativa de vacunar al 40% de los niños dentro del grupo objetivo en 2024.

Por otro lado, la Consejería de Sanidad de la región anima a los padres y cuidadores de los niños de 2 a 4 años a solicitar esta vacuna en sus centros de salud de Atención Primaria.

Este esfuerzo se alinea con las recomendaciones de la Dirección General de Salud Pública, que también sugiere una vacuación alternativa para bebés mayores de 6 meses.

Cabe destacar que la campaña de vacunación antigripal del próximo otoño no se limita solo a los niños, sino que también incluye a personas mayores de 60 años y a aquellos que forman parte de grupos de riesgo, como pueden ser enfermos crónicos, mujeres embarazadas, profesionales del ámbito sanitario y trabajadores de centros sociosanitarios, entre otros.

Este enfoque integral en la vacunación busca minimizar la incidencia de la gripe en la población y proteger a los grupos más vulnerables.

La implementación de programas de vacunación ha demostrado ser un elemento clave en la lucha contra enfermedades infecciosas a lo largo de la historia.

En el caso de la gripe, vacunarse anualmente es fundamental, ya que el virus puede mutar con facilidad y, por lo tanto, las vacunas deben adaptarse cada temporada para ofrecer la mayor protección posible.

La Comunidad de Madrid, al incorporar estas vacunas intranasales, se suma a la tendencia global hacia métodos menos invasivos y más efectivos para la inmunización de la población más joven.