Dieciséis médicos del Hospital Universitario Infanta Sofía celebran la finalización de su especialización en un contexto marcado por la pandemia de COVID-19.

El Hospital Universitario Infanta Sofía, ubicado en San Sebastián de los Reyes, Comunidad de Madrid, ha llevado a cabo un emotivo acto de graduación para 16 médicos que finalizaron su periodo de formación como médicos internos residentes (MIR). Este evento es especialmente significativo, ya que estos profesionales de la salud comenzaron su formación en medio de la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, un contexto que ha traído consigo múltiples desafíos.De 2020 a 2024, estos jóvenes médicos han atravesado una trayectoria educativa marcada por la adversidad, incluyendo la crisis provocada por la pandemia y la nevada histórica Filomena, que afectó gravemente a la comunidad madrileña.

Acompañados por tutores y colegas, los residentes del cuarto año compartieron palabras de agradecimiento hacia el personal sanitario del hospital que les brindó apoyo durante su formación.

En esta promoción han despuntado especialidades como Radiodiagnóstico, Oftalmología, Pediatría, Medicina Preventiva y Salud Pública, Neurología, Neumología, Dermatología, así como Medicina Familiar y Comunitaria.

Antonio Romero Plasencia, director gerente del Hospital, felicitó a los nuevos especialistas subrayando la relevancia de su esfuerzo y dedicación en tiempos inciertos, recordando a estos médicos que su viaje formativo comenzó en un momento crítico para la salud pública.

Además, la Dra.

M. Teresa Ramírez Prieto, jefa de Estudios, enfatizó las dificultades que han enfrentado debido a la pandemia, resaltando la docencia como pilar fundamental en la transformación de la atención sanitaria.

En los últimos años, el interés por la formación MIR en el Hospital Universitario Infanta Sofía ha crecido considerablemente.

Este año, 2024, un total de 126 médicos han elegido este centro para continuar su formación, lo que refleja el prestigio y la calidad educativa que se ofrece.

Esto resalta un cambio notable en el panorama de la formación médica, donde cada vez más profesionales buscan especializarse en un entorno que favorece tanto la educación como la práctica clínica.

La historia de la formación MIR en España se remonta a 1978, y desde entonces, ha evolucionado para adaptarse a las crecientes exigencias del sistema de salud.

La capacitación de estos médicos es esencial no solo para su desarrollo professional, sino también para asegurar que el sistema sanitario cuente con profesionales altamente capacitados.

Cada año, miles de médicos se presentan a las pruebas de acceso a estas plazas, lo que demuestra el hambre de conocimiento y la dedicación hacia la medicina.

La finalización de esta promoción no solo representa un hito personal para estos médicos, sino también un paso hacia el fortalecimiento del sistema sanitario madrileño, que se enfrenta a la necesidad constante de refrescar y renovar su plantilla de profesionales de la salud.