Un estudio realizado en Madrid demuestra que la dieta mediterránea, en especial el aceite de oliva virgen extra, puede ser beneficioso en la lucha contra el cáncer.
La Comunidad de Madrid ha participado en una investigación conjunta con el IMDEA Alimentación y el Instituto de Investigación Biomédica de Málaga para analizar el efecto del hidroxitirosol, componente presente en el aceite de oliva virgen extra, en las células de los carcinomas de colon.
Los resultados obtenidos han revelado que este compuesto tiene la capacidad de modificar la expresión del ADN y actuar sobre genes específicos, lo cual reduce el riesgo de padecer enfermedades relacionadas con esta afección.
Este hallazgo representa un avance significativo en la búsqueda de nuevos elementos que puedan incorporarse a la dieta con el objetivo de prevenir la proliferación de trastornos prevalentes.
Además, abre la puerta a futuras investigaciones para profundizar en los beneficios que puede aportar el aceite de oliva virgen extra en la lucha contra el cáncer.
El IMDEA Alimentación, centro especializado de la Comunidad de Madrid, tiene como misión analizar las alteraciones moleculares y metabólicas asociadas a enfermedades crónicas relacionadas con la alimentación.
Éxito en intervención quirúrgica conjunta a adolescente de 13 años
La Unidad de Coloproctología del Hospital Universitario de La Princesa y el Servicio de Cirugía Pediátrica del Hospital Universitario Infantil Niño Jesús han llevado a cabo una exitosa colectomía laparoscópica a un niño de 13 años con Enfermedad Inflamatoria Intestinal. Esta colaboración entre ambos hospitales provee la mejor asistencia médica para los pacientes con esta patología.Estas patologías incluyen la obesidad, afecciones cardiometabólicas, tumores malignos y dolencias vinculadas al envejecimiento.
A través de estrategias de nutrición de precisión, se busca evitar su aparición y mejorar su tratamiento.
La dieta mediterránea, reconocida internacionalmente por sus beneficios para la salud, se caracteriza por el consumo de alimentos como frutas, verduras, legumbres, pescado, cereales y aceite de oliva virgen extra.
Este último constituye una fuente importante de ácidos grasos monoinsaturados y polifenoles, dos componentes clave en la prevención de enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
En conclusión, la investigación llevada a cabo en Madrid confirma una vez más los beneficios de la dieta mediterránea y particularmente del aceite de oliva virgen extra en la lucha contra el cáncer.
Estos nuevos hallazgos abren la puerta a seguir explorando los beneficios de ciertos componentes alimenticios y su impacto en la prevención y tratamiento de enfermedades graves.