La Comunidad de Madrid proyecta la construcción de 40 residencias y 40 centros de día hasta 2030, generando empleo y mejoras en la atención a mayores.
La Comunidad de Madrid está dando un paso importante en la mejora de la atención a las personas mayores y dependientes con el anuncio de la construcción de 40 nuevas residencias y 40 centros de día hasta el año 2030. Este ambicioso plan fue presentado por la presidenta Isabel Díaz Ayuso durante el Debate del Estado de la Región, donde enfatizó la necesidad de atender a una población en crecimiento que demanda estos servicios.
La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, comunicó esta iniciativa en el marco de la celebración del Día Internacional del Mayor en la Residencia Amavir de Ciudad Lineal.
Este centro, inaugurado hace dos décadas, fue parte de un modelo público-privado similar al que se implementará ahora.
Se prevé que las nuevas instalaciones se ubiquen en terrenos proporcionados por los ayuntamientos, lo que asegura que estén más accesibles y adaptados a las necesidades de cada comunidad.
De las 80 nuevas estructuras proyectadas, alrededor de 30 se establecerán en diversos distritos de la capital, mientras que el resto se dispersará por otros municipios de la región, tomando en cuenta la disponibilidad actual de plazas y otros recursos sociales.
La Consejería de Asuntos Sociales ya ha recibido numerosas solicitudes de intereses por parte de corporaciones locales que ven en esta iniciativa una oportunidad para mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos.
El objetivo más inmediato de las conversaciones entre la Comunidad y los ayuntamientos es identificar las parcelas municipales que cumplan con los requisitos de tamaño y localización para la construcción de los nuevos centros.
Expertos de la Dirección General de Atención al Mayor y a la Dependencia evaluarán las propuestas para definir las ubicaciones, iniciando posteriormente los estudios de viabilidad y diseño.
Con una inversión prevista de aproximadamente 500 millones de euros (cerca de 550 millones de dólares) mediante colaboraciones público-privadas, se anticipa que la construcción de estos centros genere alrededor de 5.600 empleos directos y 15.000 indirectos.
Esto representa un impulso significativo para el mercado laboral local, además de garantizar la creación de 2.460 plazas residenciales y 804 plazas diurnas en la red pública.
Los nuevos centros contarán con un máximo de 150 plazas y más del 50% de las habitaciones serán individuales, asegurando la privacidad y comodidad de los residentes.
Para fomentar un entorno familiar, se organizarán en unidades de convivencia que simulan un hogar, integrando los últimos avances en atención y cuidado.
Cada residente tendrá un plan individual de atención y un profesional asignado que se encargará de un número reducido de personas, favoreciendo una atención personalizada.
Este proyecto no solo busca satisfacer la demanda creciente en la atención a mayores, sino que también representa un compromiso firme por parte de la Comunidad de Madrid hacia un modelo de atención social de alta calidad, con rigurosos sistemas de control para garantizar el bienestar de sus usuarios.
Asimismo, en cinco de estas nuevas instalaciones se ofrecerá la opción de vivienda a personas mayores autónomas, lo que demuestra una visión integral hacia un envejecimiento activo y saludable.