La Comunidad de Madrid ha integrado 17 robots en la gestión administrativa, logrando importantes reducciones en los tiempos de tramitación y un ahorro significativo de horas de trabajo.

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La Comunidad de Madrid ha dado un paso importante hacia la modernización de su administración pública al incorporar 17 robots en distintos procesos de gestión administrativa.

Según las autoridades, esta implementación ha permitido reducir el tiempo de tramitación en un 50% en comparación con las tareas realizadas manualmente, lo que resulta en un significativo ahorro de aproximadamente 14.250 horas de trabajo anualmente.

De los 17 robots, 13 comenzaron a operar en el año 2024, mientras que cuatro más se han sumado a principios de este año 2025. Las proyecciones son igualmente alentadoras; en el primer semestre de 2025, se espera que se integren 44 nuevos casos de automatización. Solo los últimos cuatro dispositivos han demostrado ser tan eficaces que logran un ahorro de tiempo superior al 70% en las labores que anteriormente realizaban los funcionarios.

Un ejemplo destacado de esta modernización se encuentra en el área de Justicia. Aquí, un software ha logrado procesar todas las tasaciones de costas pendientes de 2024 en un juzgado madrileño en un solo mes. En el sector de Economía, otro robot se ha encargado de tramitar 1.200 expedientes electrónicos de ayudas al empleo en enero. Este sistema ha conseguido reducir los plazos de resolución en un 71%, permitiendo que todas las solicitudes se encuentren al día.

Asimismo, en Asuntos Sociales, la automatización ha facilitado la gestión de alrededor de 200 expedientes para pensiones no contributivas en un solo mes, mejorando el tiempo de respuesta en un 58,7%.

En el ámbito de la Sanidad, se ha implementado un proceso robótico para las solicitudes de prestaciones ortoprotésicas, lo que ha llevado a una reducción del 78,9% en el tiempo de procesamiento, ahorrando aproximadamente 1.800 horas de trabajo al año.

La creación de la Factoría de Automatización Robótica de Procesos (RPA), llevada a cabo por la Consejería de Digitalización a finales de 2023 con una inversión de 6,7 millones de euros (6,7 millones de €), tiene como objetivo mecanizar más de 200 procedimientos administrativos.

Este proyecto es uno de los más ambiciosos en términos de innovación, diseñado para no solo mejorar la atención a los madrileños sino también para elevar la productividad de los empleados públicos.

La tecnología utilizada permite robotizar tareas repetitivas que anteriormente requerían intervención humana. Por ejemplo, a través del reconocimiento óptico de caracteres, cuando un ciudadano presenta un documento con su solicitud, el sistema es capaz de identificar automáticamente la información necesaria y transferirla al sistema sin que el funcionario tenga que ingresarla manualmente.

Además, esta automatización ha permitido que el tiempo necesario para presentar solicitudes en línea se haya reducido en un 51%, mientras que el promedio de respuesta a los ciudadanos ha bajado un 35%.

Según declaraciones de López-Valverde, la calidad de los servicios digitales ha mejorado un 44% y la eficiencia ha crecido en un 45%. La plataforma Cuenta Digital es un claro ejemplo del éxito de esta iniciativa, ya que desde julio del año anterior, ha alcanzado más de 390.000 usuarios activos, generando más de dos millones de accesos, la mayoría a través de dispositivos móviles, y con más de 240.000 trámites completados.