Se autorizó una significativa inversión para gestionar centros que atienden a menores con discapacidad intelectual.

El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha dado luz verde a una importante inversión de 6,6 millones de euros, unos 7,2 millones de dólares, destinada al contrato para la gestión de cuatro centros de acogimiento residencial especializados en la atención de menores con discapacidad intelectual, tanto moderada como severa, que requieren cuidados sociosanitarios.
Este acuerdo, que tiene como objetivo mejorar las condiciones de vida y desarrollo de estos jóvenes, estará vigente desde el 1 de enero de 2025 hasta el 31 de diciembre de 2026.
Con esta medida se busca ofrecer un espacio seguro y adecuado para 33 menores, que recibirán alojamiento, atención y educación hasta que cumplan los 17 años.
Esta iniciativa se enmarca dentro de las políticas de protección a la infancia que promueve la Dirección General de Infancia, Familia y Fomento de la Natalidad.
La intervención con cada menor será de carácter individual e integral, enfocándose en sus necesidades específicas y en su unidad de convivencia.
Además, se proporcionarán servicios que van desde el acompañamiento en la tramitación de documentos hasta actuaciones designadas a fomentar la autonomía personal de los jóvenes.
Uno de los cuatro centros estará específicamente orientado a atender a menores de 0 a 6 años que presenten discapacidades intelectuales o que hayan sido diagnosticados con graves problemas de salud al nacer.
Este centro cuenta con 10 plazas disponibles y ofrecerá atención especializada y cuidados de enfermería ininterrumpidamente, 365 días al año, las 24 horas del día.
Es importante destacar que el acogimiento residencial tiene un carácter temporal, mientras se buscan alternativas para reintegrar a los menores en su entorno familiar.
La activación de estos recursos se contempla cuando no es factible brindar los apoyos necesarios o cuando las medidas implementadas para mantener a los menores en su hogar no son efectivas.
La creación de estos centros no solo responde a una necesidad presente en la sociedad, sino que también es un reflejo del compromiso de la Comunidad de Madrid con la atención a la diversidad y el bienestar de los más vulnerables.
Históricamente, las políticas de acogida en la región han evolucionado para adaptarse a las necesidades cambiantes de la población juvenil, asegurando que cada menor tenga la oportunidad de recibir el apoyo adecuado en todas las etapas de su desarrollo.
Esta nueva inversión es una muestra más del esfuerzo del gobierno regional por garantizar una atención digna y de calidad a los niños y adolescentes que más lo necesitan.