La presidenta Isabel Díaz Ayuso anuncia una normativa para limitar el uso de dispositivos tecnológicos en escuelas de la región, buscando proteger la salud y el rendimiento escolar de los estudiantes.
La Comunidad de Madrid ha decidido dar un paso significativo en la regulación del uso de dispositivos tecnológicos en los colegios e institutos de la región.
A partir del curso académico 2025/26, se establecerá por primera vez una normativa que regule el uso de ordenadores, tabletas y otros dispositivos similares en más de 2.000 centros educativos.
Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad, hizo este anuncio en su comparecencia después de la última reunión del Consejo de Gobierno del año.
La Consejería de Educación, Ciencia y Universidades ha comenzado a trabajar en un Decreto que definirá claramente el tiempo de uso permitido de estos dispositivos, tanto de manera individual como colectiva, teniendo en cuenta factores como la edad y la madurez de los estudiantes.
Este proyecto tiene como objetivo crear un marco común que los centros educativos podrán adaptar a su autonomía, permitiendo establecer medidas que protejan a sus alumnos.
Uno de los principales motivos de esta regulación es la creciente preocupación por los riesgos asociados al uso excesivo o inadecuado de la tecnología, especialmente en nuevas generaciones que se enfrantan a un entorno digital cada vez más complejo.
Diversos estudios han señalado cómo el uso apresurado de dispositivos puede afectar negativamente la salud mental y el rendimiento académico de los jóvenes.
Por ello, la nueva normativa busca ofrecer una solución equilibrada, que limite la exposición de los niños a estas tecnologías en sus primeras etapas de desarrollo.
El Gobierno regional también ha recordado que, de forma paralela, se está trabajando en la nueva Ley de Enseñanzas Superiores, Ciencia y Universidades.
Esta ley se enviará a la Asamblea legislativa autonómica para su tramitación y aprobación en el año 2025, incorporando las diversas contribuciones obtenidas durante la fase de consulta pública que se ha realizado anteriormente.
Esta consulta ha reunido numerosas aportaciones de diferentes actores y expertos del sector educativo, indicando la importancia y relevancia de la participación en el desarrollo de normativas que afectan al ámbito de la educación.
Históricamente, España ha visto un aumento en el uso de tecnología en las aulas desde la introducción de programas como el 'Plan de Digitalización de Centros Educativos', que se lanzó hace varios años en un intento por modernizar el sistema educativo.
Sin embargo, a medida que este uso se ha extendido, también han surgido críticas sobre los posibles efectos adversos en los estudiantes.
Con esta nueva normativa, la Comunidad de Madrid se posiciona como una de las regiones pioneras en la regulación del uso de tecnologías en la educación, anticipándose a los desafíos que presenta la sociedad digital.
La implementación de estas medidas a partir de 2025 promete sentar un precedente para otras comunidades autónomas, que podrían adoptar enfoques similares en el futuro.
En definitiva, se busca garantizar un entorno educativo más saludable y equilibrado para las nuevas generaciones.