La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha una nueva campaña informativa para promover un uso eficaz de las calderas de gas, con el objetivo de prevenir accidentes y concienciar a la población sobre la importancia del mantenimiento adecuado de estos dispositivos.

La campaña, que se difundirá hasta el próximo 10 de diciembre, estará presente en prensa digital y en cuñas radiofónicas.

Entre las indicaciones incluidas en la campaña, se hace hincapié en la importancia de vigilar las rejillas de ventilación de las calderas, comprobando que la llama sea siempre azul y no amarilla.

También se recomienda no almacenar bombonas de gas en zonas que puedan alcanzar altas temperaturas, para evitar posibles explosiones o intoxicaciones por monóxido de carbono.

Carlos Novillo, consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, ha presentado esta iniciativa durante su visita a la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía (AGREMIA). Ha destacado la importancia de concienciar a los ciudadanos sobre el buen uso y mantenimiento de las calderas de gas, así como la colaboración con las empresas del sector para garantizar la seguridad de las instalaciones.

Además, la Comunidad de Madrid ha lanzado una convocatoria de ayudas del Plan Renove para calderas de condensación y aires acondicionados, con una inversión de 5,5 millones de euros.

El objetivo es fomentar la sustitución de aparatos antiguos por otros más eficientes y de mayor rendimiento.

Estas ayudas han permitido reemplazar más de 16.500 equipos y beneficiar a más de 40.000 personas.

En el caso de las calderas de condensación, los incentivos alcanzan los 350 euros, que se incrementan a 450 euros si se incorpora un sistema de gestión energética.

Además, se otorgan subvenciones de 150 euros para los calentadores estancos de bajas emisiones de óxidos de nitrógeno.

En cuanto a los aires acondicionados, las ayudas oscilan entre 200 y 500 euros por vivienda.

Los nuevos dispositivos presentan un mayor rendimiento y permiten reducir el consumo de energía hasta en un 20%. Esto implica un ahorro significativo para las familias que opten por cambiar sus calderas antiguas por modelos de condensación, que pueden ahorrar más de 250 euros al año de media.

Teniendo en cuenta el coste de la instalación, que ronda los 1.500 euros, se estima que el periodo de amortización se sitúa entre tres y seis años.

La Comunidad de Madrid pone a disposición de los ciudadanos toda la información sobre esta campaña informativa y las ayudas disponibles en su página web institucional, que se puede consultar en el siguiente enlace: https://www.comunidad.madrid/inversion/energia/gas-siempre-seguridad