La Comunidad de Madrid ha realizado una inversión de 8,8 millones de euros para abrir cinco nuevas escuelas infantiles públicas en el curso 2024/25, con un total de 930 plazas escolares.
En Madrid, la Comunidad de Madrid ha realizado una inversión de 8,8 millones de euros (8.8 millones de Euros) para la apertura este próximo curso 2024/25 de cinco nuevas escuelas infantiles públicas con 930 plazas escolares.
La construcción de estos centros educativos, situados en Arganzuela, Villaverde, El Cañaveral, Ensanche de Vallecas y Valdebebas, en la capital, ha supuesto para el Ejecutivo autonómico una inversión total de 17 millones de euros (17 millones de Euros).
El Consejo de Gobierno ha aprobado en su reunión de hoy licitar los contratos para la gestión indirecta de estos recursos públicos, que tienen como objetivo ofrecer la mejor educación en esta etapa además de facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar y también la igualdad de oportunidades.
Todas estas escuelas constan de 186 plazas divididas en 12 aulas: dos de niños de 0 a 1 años, cinco de 1 a 2 años y otras cinco de 2 a 3. En todos los casos los contratos se prolongarán hasta agosto de 2027.
Para la selección de ofertas se tendrán en cuenta criterios como el proyecto educativo, la propuesta pedagógica, el plan de atención a los alumnos con necesidades de apoyo educativo, la gestión de los recursos humanos o la propuesta de actividades complementarias.
Las familias de los niños de estas cinco nuevas escuelas infantiles públicas, como las del resto de la red pública regional, se benefician de la gratuidad en su escolarización en esta etapa educativa no obligatoria, una medida en vigor desde hace 5 años.
Gracias a estas iniciativas, la tasa de escolarización para los menores de 3 años se sitúa ya en el 55,3%, la segunda de España y cerca de 10 puntos por encima de la media nacional.
La educación infantil es una etapa fundamental en el desarrollo de los niños, ya que sienta las bases para su futuro académico y profesional.
Contar con escuelas infantiles públicas de calidad, como las inauguradas por la Comunidad de Madrid, es clave para garantizar el acceso a una educación inclusiva y de excelencia para todos los niños.
Además, la inversión en infraestructuras educativas contribuye al desarrollo económico y social de la región, generando empleo y mejorando la calidad de vida de sus habitantes.