La incertidumbre persiste en Ucrania tras la elección de Donald Trump, con el temor de que su política afecte el apoyo militar y económico vital en la lucha contra Rusia.
Kyiv: La congratulación de los funcionarios ucranianos hacia el presidente electo Donald Trump este miércoles fue rápida y efusiva, pero no logró ocultar los temores y la incertidumbre que ahora rondan el futuro de Ucrania.
Muchos diputados ucranianos reconocen que asegurar las armas estadounidenses necesarias en la guerra contra Rusia requerirá convencer a Trump de respaldar un conflicto que él parece considerar demasiado costoso.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, calificó la victoria electoral de Trump como "impresionante". Recordó la "gran reunión" que mantuvieron en septiembre en Estados Unidos y habló sobre las "formas de poner fin a la agresión rusa contra Ucrania".
Andriy Yermak, jefe de la oficina presidencial y principal asesor de Zelensky, secundó las felicitaciones a Trump, añadiendo que es "esencial que Ucrania cuente con apoyo bipartidista en Estados Unidos".
"Rusia y los autócratas solo comprenden el lenguaje del poder", escribió Yermak en Telegram.
"Los agresores deben ser devueltos a límites claros de justicia".
Sin embargo, la medida en que Zelensky y Trump encontrarán puntos en común, especialmente dada su historia tensa, aún está por verse, ya que Trump ha expresado dudas sobre continuar apoyando el esfuerzo bélico de Ucrania.
La ofensiva ucraniana en el este se mantiene estancada ante la férrea defensa rusa
Las tropas ucranianas luchan por avanzar en su contraofensiva en el sur y este del país mientras las fuerzas rusas no escatiman recursos para detenerlos. A pesar de los avances mínimos, las bajas aumentan y las defensas rusas se mantienen firmes.Zelensky insiste en que Ucrania debe seguir luchando y no hacer compromisos territoriales.
No obstante, el país depende críticamente de la ayuda económica y militar de los Estados Unidos para su defensa.
Por otro lado, Trump ha prometido poner fin a la guerra tan pronto como sea posible.
En su discurso del miércoles, declaró: "No voy a iniciar guerras.
Voy a detener guerras".
Este contexto es importante en la historia reciente de Ucrania, que desde la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014 y el estallido del conflicto en el este del país, ha estado buscando apoyo internacional para hacer frente a la agresión rusa.
Desde entonces, la relación entre Ucrania y Estados Unidos se ha vuelto crucial, y el papel de los presidentes en el apoyo o la limitación de la ayuda militar se ha evidenciado en cada administración.
El futuro de la colaboración entre Ucrania y Estados Unidos, especialmente bajo la presidencia de Donald Trump, será un tema de gran scrutinio en los próximos meses y años.
La comunidad internacional y los aliados de Ucrania también estarán atentos a cualquier cambio en la política de Washington, dada la importancia de la ayuda estadounidense para la defensa y recuperación del país en medio de la crisis actual.