Ucrania ha empleado misiles de largo alcance proporcionados por Estados Unidos en un ataque a la región de Bryansk, lo que marca un nuevo capítulo en la guerra en curso.

Kyiv, Ucrania: La reciente escalada militar entre Ucrania y Rusia ha tomado un giro inquietante, ya que Ucrania ha lanzado seis misiles de largo alcance, suministrados por Estados Unidos, hacia la región de Bryansk en Rusia.

Esto representa el primer uso de estos misiles en territorio ruso desde el inicio del conflicto, que ya cumple mil días.

La utilización del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército, conocido como ATACMS, se produce en un contexto en el que el presidente ruso, Vladimir Putin, ha oficialmente reducido el umbral para el uso de armas nucleares, sugiriendo así la posibilidad de una respuesta nuclear ante un ataque convencional, incluso si proviene de un país apoyado por una potencia nuclear, como es el caso de Ucrania respaldada por Estados Unidos.

Un canal de Telegram vinculado al ejército ucraniano publicó un video que supuestamente muestra el lanzamiento de misiles ATACMS desde una ubicación secreta en Ucrania, aunque la Associated Press no ha podido verificar de manera independiente la fecha y el lugar de la filmación.

Este desarrollo marca una preocupación creciente sobre la escalada de la guerra, que ha incrementado las tensiones internacionales de manera notable.

Recientemente, funcionarios estadounidenses expresaron su alarma por el despliegue de tropas norcoreanas en apoyo a las fuerzas rusas, mientras que Moscú mostró su descontento tras el alivio de las restricciones de armas ATACMS por parte de Washington.

En esta coyuntura, el umbral de los mil días de guerra ha renovado la atención sobre cómo se está desarrollando el conflicto y las posibles vías para su resolución, especialmente con la próxima llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, quien ha prometido poner fin rápidamente a la guerra y ha cuestionado el gasto estadounidense en el apoyo a Ucrania.

Los analistas señalan que ni Rusia ni Ucrania pueden sostener la guerra por mucho más tiempo; sin embargo, Rusia posee recursos que le permiten mantener su esfuerzo bélico durante más tiempo que Ucrania.

Las fuerzas ucranianas enfrentan una intensa presión por parte de las tropas rusas en varios puntos de un frente que se extiende a lo largo de aproximadamente mil kilómetros, dejando al ejército ucraniano estirado y vulnerable.

Además, los civiles ucranianos han estado bajo un constante ataque de drones y misiles rusos, lo que agrava la ya grave situación humanitaria.

La noche del martes, Ucrania afirmó haber alcanzado un depósito de armas militares en la región de Bryansk, aunque no detalló los tipos de armas utilizadas en el ataque.

El Estado Mayor ucraniano informó sobre múltiples explosiones escuchadas en la zona de Karachev.

Durante una conferencia de prensa, se le preguntó al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, si los misiles ATACMS fueron utilizados en el ataque al depósito de municiones.

Zelensky optó por no dar detalles, pero afirmó: "Ucrania tiene capacidades de largo alcance, incluyendo drones de fabricación nacional de largo alcance... y ahora contamos con los ATACMS también."

Esta nueva fase en el conflicto subraya el peligro de la escalada y los posibles resultados devastadores, no solo para Ucrania y Rusia, sino para la estabilidad de toda la región y el mundo.