Donald Trump hace declaraciones controversiales sobre los inmigrantes ilegales, sugiriendo que los criminales tienen 'malos genes' en una reciente entrevista.

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En una reciente entrevista con el presentador de radio Hugh Hewitt, Donald Trump, ex-presidente de Estados Unidos y candidato presidencial de nuevo, hizo comentarios polémicos sobre los inmigrantes ilegales, afirmando que aquellos que han cometido crímenes poseen 'malos genes'. Esta declaración se suma a una larga lista de retórica que ha sido considerada deshumanizante y racista hacia los inmigrantes.

Durante la conversación, Trump criticó el desempeño de la Vicepresidenta Kamala Harris en temas de seguridad fronteriza, acusándola de permitir la entrada de personas a través de una frontera abierta y de haber liberado a 13,000 inmigrantes indocumentados con antecedentes de homicidio, cifra que distorsiona datos recientes del gobierno federal.

Trump, en un tono que busca deslegitimar a quienes están en el país de manera ilegal, dijo: 'Yo creo que un asesino está en sus genes'. Afirmó que 'tenemos muchos malos genes en nuestro país en este momento', argumentando que 425,000 personas han ingresado al país que, según él, no deberían estar aquí y son delincuentes.

Sin embargo, es crucial señalar que el dato mencionado por Trump proviene de estadísticas de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que han sido malinterpretadas.

Estas cifras abarcan un periodo extenso, que incluye décadas anteriores a la administración actual de Joe Biden, y engloban a criminales condenados que podrían no estar bajo la jurisdicción de ICE.

Desde que Trump lanzó su campaña presidencial en 2015, ha enfrentado críticas por sus comentarios sobre inmigrantes.

Su lenguaje ha evolucionado hacia descripciones más oscuras y peyorativas en su búsqueda de apoyo popular.

Por ejemplo, en ocasiones anteriores, el ex-presidente afirmó que los inmigrantes indocumentados 'están envenenando la sangre de nuestro país', e incluso sugirió la expulsión de inmigrantes legalmente establecidos, como fue el caso de los haitianos en Springfield, Ohio.


Además, él y su compañero de campaña, J.D. Vance, han impulsado afirmaciones erróneas sobre inmigrantes acusándolos de haber envenenado a mascotas en esa localidad.

Los comentarios más recientes de Trump sobre 'malos genes' intensifican su retórica, alineándose con estereotipos que sugieren que los extranjeros son genéticamente inferiores a los estadounidenses.

Tal discurso no es nuevo para Trump; en 2020 elogió a un público predominantemente blanco en Minnesota por tener 'buenos genes'. Asimismo, ha mencionado en varias oportunidades la 'teoría del pura raza', un concepto que pretende captar la idea de que personas con cualidades superiores transmiten esas características a sus descendientes.

Este tipo de afirmaciones no solo fomentan divisiones en una sociedad ya polarizada, sino que también alimentan el miedo y el estigma hacia las comunidades inmigrantes.

En la historia reciente de Estados Unidos, especialmente desde la década de 2010, la narrativa en torno a la inmigración ha sido objeto de intensos debates, resaltando el papel que juegan los medios de comunicación y los políticos en la construcción de percepciones erróneas sobre la criminalidad y el estatus migratorio.

La retórica de Trump continúa teniendo un impacto considerable en el discurso político actual, lo que refuerza la necesidad de un análisis crítico y basado en datos sobre la inmigración y su relación con la seguridad.