Un hombre fue arrestado en Corrientes por faenar un caballo robado y vender su carne en bolsas en el barrio Narciso Vega, en un caso que ha generado preocupación por la seguridad y el delito en la zona.

La policía local informó que el sospechoso, identificado con las iniciales E.E.R., de 46 años, fue sorprendido mientras intentaba comercializar la carne en bolsas de arpillera en plena vía pública.
Según fuentes oficiales, el operativo se originó tras una denuncia anónima que alertó sobre la presencia de un hombre vendiendo carne en condiciones poco higiénicas en el sector.
Cuando el personal policial rural acudió al lugar, lograron detener al sospechoso y confiscar la mercancía. Las pericias realizadas por los agentes confirmaron que la carne era de caballo, lo que generó aún más sospechas sobre la origen del animal.
Supuestamente, en el lugar también se encontró un predio cercano donde estaban los restos del equino, que habrían sido faenados en circunstancias ilegales.
La investigación reveló que el caballo contaba con un chip de identificación, mediante el cual se estableció que pertenecía a otra persona, quien supuestamente había denunciado el #robo del animal días antes.
Este hecho pone en evidencia la problemática del #abigeato en la región, un delito que en Argentina, y en otros países de la región, ha sido un flagelo para los productores rurales durante décadas.
Se estima que, en términos económicos, el robo de ganado supone pérdidas millonarias para los agricultores y criadores, y fomenta la proliferación de mercados ilegales de carne.
La carne de caballo, en particular, ha sido objeto de controversia, ya que en varias ocasiones se ha vinculado con la comercialización en el mercado negro.
El presunto responsable quedó detenido y se inició una causa por el delito de abigeato
El presunto responsable quedó detenido y se inició una causa por el delito de abigeato, que en Argentina implica el robo y faena clandestina de ganado.
La legislación de ese país contempla penas que pueden variar desde varios meses hasta años de prisión, dependiendo de la gravedad del delito y las circunstancias.
El caso ha generado preocupación en la comunidad, que teme que estos delitos puedan aumentar si no se toman medidas preventivas efectivas. Autoridades locales y nacionales han prometido reforzar los controles en las zonas rurales y los mercados clandestinos para evitar que hechos similares se repitan.
Este incidente también trae a la memoria casos históricos en los que el abigeato ha provocado crisis en regiones enteras, afectando la economía y la #seguridad alimentaria.
La lucha contra este delito requiere no solo acciones policiales, sino también campañas de sensibilización y medidas legislativas que protejan al productor rural y regulen la venta de carne en forma legal y segura.