La controvertida historia detrás del retrato de John Gorton pintado por June Mendoza en 1971

A pesar de ser una de las retratistas más prolíficas del mundo en ese momento, Mendoza no imaginaba las consecuencias de su obra.
Fue presentada a Gorton a través de su secretaria privada Ainsley Gotto, en lo que se convirtió en una sesión de retrato informal en la residencia oficial del primer ministro.
El cuadro, que mostraba a Gorton de manera casual y desenfadada, fue objeto de críticas y controversia. A día de hoy, sigue siendo el único retrato de un primer ministro australiano pintado por una mujer.
El contraste con sus antecesores, más solemnes y formales, causó revuelo. Incluso el sucesor de Gorton intentó bloquear su exhibición en el Parlamento debido a la vestimenta informal del retratado. Sin embargo, finalmente la obra fue colgada en el edificio, a pesar de las objeciones de algunos miembros del gobierno.
La rivalidad #política con Malcolm Fraser añadió tensión a la sesión de retrato
El tiempo que Mendoza pasó junto a Gorton en su residencia oficial coincidió con sus últimos días en el cargo. La rivalidad política con Malcolm Fraser añadió tensión a la sesión de retrato, que estuvo a punto de no llevarse a cabo. La pintora se vio involucrada de forma inesperada en la historia política de Australia, presenciando de cerca los acontecimientos que marcaron el final del mandato de Gorton.