Un lote reciente de expedientes desclasificados incluye referencias al expresidente Donald Trump dentro del marco de la investigación sobre Jeffrey Epstein, con varios pasajes que requieren cautela por tratarse de alegatos no verificados.
Según el conjunto difundido en las últimas semanas, varias piezas señalan a #Trump en contextos que, si bien no han sido formalizados como cargos, han generado controversia y debate público.
Entre los documentos destacan correos electrónicos en los que diferentes interlocutores enlazan noticias políticas sobre Trump, y también hay referencias relacionadas con los viajes que, supuestamente, el expresidente habría realizado en el avión privado de Epstein.
A esto se suma un testimonio que, presuntamente, atribuye a una mujer la afirmación de haber sido violada por #Epstein y, presuntamente, por otras personas vinculadas al círculo del empresario.
Estos pasajes figuran en informes que forman parte de la nueva tanda de archivos puestos a disposición del público.
El Departamento de Justicia afirmó en un comunicado que varios de estos documentos "contienen acusaciones falsas y sensacionalistas contra el presidente Trump, presentadas al FBI justo antes de las elecciones de 2020".
En ese mismo mensaje se indica que esas acusaciones carecen de fundamento y que, si tuvieran credibilidad, ya habrían sido usadas en su contra. Esta declaración oficial ha generado reacciones y ha sido objeto de análisis entre analistas y observadores que siguen el alcance de la publicación de estos archivos desclasificados.
Entre las piezas relevantes se encuentra, por ejemplo, una declaración al FBI fechada el 27 de octubre de 2020, en la que un conductor de limusinas de Dallas afirma haber llevado a Trump al aeropuerto de Fort Worth (Texas) en 1995.
El conductor afirmó, supuestamente a una conocida, que esa reunión podría haber significado que una mujer habría afirmado luego que "Donald J. Trump la violó junto con Jeffrey Epstein" y que una joven con un nombre poco común habría participado en un traslado a un hotel o edificio de lujo, describiendo así un posible episodio que, de confirmarse, tendría implicaciones graves para la percepción pública de los hechos.
En la que una mujer anónima detalla supuestos abusos cometidos por Epstein y Maxwell
Otra pieza de los archivos incluye una denuncia presentada en enero de 2020 en Nueva York, en la que una mujer anónima detalla supuestos abusos cometidos por Epstein y Maxwell, y relata un encuentro de 1994 en el que Epstein habría llevado a una supuesta víctima a presentar a Trump, quien, según la mujer, habría mostrado complicidad ante ciertos comentarios sugerentes.
En este punto, la documentación menciona una carta supuestamente firmada por Epstein y dirigida a un “nuestro presidente” que alude al interés en realizar actos de intimidación sexual; aunque no nombra explícitamente a Trump, el texto sugiere un vínculo temático con el círculo presidencial.
También hay menciones que señalan que Trump organizó, supuestamente, una fiesta para trabajadoras sexuales en su residencia de Mar-a-Lago, según una de las declaraciones incluidas en los expedientes.
En paralelo, un fiscal federal señaló que Trump habría volado, muchas más veces de lo que se creía, a bordo del avión privado de Epstein; si bien estos vuelos ya eran de dominio público, los correos muestran que fiscales compartían estos datos por primera vez en 2020.
El Departamento de Justicia ha seguido publicando documentos desclasificados durante los últimos días, en el marco de una ley aprobada en noviembre para liberar material relacionado con Epstein y su red.
Trump, por su parte, apareció en varias referencias, habiendo inicialmente mostrado reticencia a apoyar la publicación y luego, ante la presión legislativa y pública, haber firmado la ley que posibilitó la desclasificación.
En cualquier caso, la información contenida en estos archivos debe ser tratada con cautela: se trata de material que, si bien aporta contexto, aún no ha sido verificado de forma independiente y podría contener elementos interpretables o incompletos.
En resumen, los documentos desclasificados aportan referencias a una figura pública de alto perfil dentro de un marco de investigaciones sobre Epstein, pero es imprescindible distinguir entre indicios, testimonios y acusaciones formales, muchos de los cuales están sujetos a revisión y debate.
A medida que avancen las revisiones y posibles respuestas oficiales, el interés por comprender las conexiones entre Epstein y otros actores de alto perfil continuará siendo tema de análisis político y judicial a nivel internacional.
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